2. Como personal de enfermería debemos
brindar la educación adecuada sobre el
embarazo y los cuidados prenatales.
conocer las funciones de la placenta y las
diferencias de la cara fetal y cara materna de
la placenta.
Dar a conocer a la madre la importancia que
tiene la placenta como órgano mediador entre
la madre y el feto.
Concientizar a la madre de la importancia de
un parto natural, si se encuentra apta para
este.
3. Constituye uno de los principales órganos
de supervivencia para el embrión.
Durante los 9 meses de gestación
comunica la madre con el feto , realizando
conjuntamente procesos como la
circulación sanguínea y eliminación de
desechos.
4. La placenta se empieza a formar en el mismo
momento de la implantación del embrión en la
pared uterina, acontecimiento que ocurre
aproximadamente a la semana de haberse
producido la fecundación. La placenta se
desarrolla de las mismas células provenientes
del espermatozoide y el óvulo que dieron
desarrollo al feto.
6. Transmitir los nutrientes al feto
Eliminación de desechos
Tolerancia inmunológica
Protege al feto de microorganismos
Protección física
7. Una vez implantada y bien sujeta en la pared
uterina, la placenta no se mueve. Puede
desplazarse y cambiar de ubicación dentro
del útero, ya que éste es como un globo que
se hincha a lo largo de los nueve meses de
gestación.
8. placenta previa: consiste en que la placenta
crece en la parte más baja de la matriz (útero)
y cubre toda la abertura hacia el cuello
uterino o una parte de ésta y que causa
hemorragias importantes durante el
embarazo y el parto.
9. Placenta previa
marginal: cuando la
placenta está cerca
del borde del cérvix.
Placenta previa
parcial: cuando la
placenta cubre el
cérvix parcialmente.
Placenta previa
total: cuando la
placenta cubre
completamente el
cérvix.
10. La placenta previa ocurre en 1 de cada 200
embarazos y es más común en mujeres que
tienen:
Un útero anormalmente formado
Muchos embarazos previos
Embarazos múltiples (gemelos, trillizos, etc.)
Cicatrización del revestimiento del útero
debido a antecedentes de embarazo anterior,
cesárea, cirugía o aborto
Las mujeres que fuman, usan cocaína o
tienen niños a una edad avanzada también
pueden tener un mayor riesgo.
11. El síntoma principal de la placenta previa es
un sangrado vaginal.
El sangrado puede ser intenso y potencialmente
mortal. Puede detenerse por sí solo, pero puede
empezar de nuevo días o semanas después.
El trabajo de parto algunas veces empieza al
cabo de varios días después del sangrado
abundante. Algunas veces, es posible que el
sangrado no ocurra hasta después del comienzo
del trabajo de parto.
12. Su proveedor de atención médica evaluará cuidadosamente
el riesgo de sangrado comparado con el riesgo de un parto
prematuro para el bebé.
Casi todas las mujeres con placenta previa necesitan una
cesárea. Si la placenta cubre todo o parte del cuello uterino,
un parto vaginal puede causar sangrado intenso, lo cual
puede ser mortal para la madre y el bebé.
Si la placenta está cerca del cuello uterino o está cubriendo
una parte de éste, el médico puede recomendar:
Reducir actividades
Guardar reposo en cama
Descanso de la pelvis, lo cual significa no tener relaciones
sexuales, ni practicarse duchas, ni usar tampones
No se debe colocar nada en la vagina.
Es posible que usted deba permanecer en el hospital para
que el equipo médico pueda monitorearlos cuidadosamente
a usted y al bebé.
13. Otros tratamiento que usted puede recibir incluyen:
Transfusiones sanguíneas
Medicamentos para prevenir un parto prematuro
Medicamentos para ayudar a que el embarazo continúe por
lo menos hasta la semana 36
Inyecciones de esteroides para ayudar a que los pulmones
del bebé maduren
Se puede hacer una cesárea de emergencia si el sangrado
es abundante y no se puede controlar.
Pronóstico
El mayor riesgo es el sangrado intenso que puede ser
potencialmente mortal para la madre y el bebé. Si tiene
sangrado profuso, el bebé tal vez necesite nacer de manera
prematura, antes de que los órganos mayores, como los
pulmones, se hayan desarrollado.
14. Trastorno que se produce cuando las capas
de la placenta se adhieren al músculo uterino
impidiendo que se libere naturalmente en el
parto.
15. Cirugías previas de útero
Cesáreas previas.
Crecimiento dentro del útero de tumores
benignos de la submucosa uterina
Edad materna de más de 35 años
Multiparidad
16. La presencia de un acretismo no da síntomas
durante el embarazo en la mayoría de los
casos.
Cuando se presentan síntomas prenatales,
éstos suelen ser hemorragias y están
relacionados a la condición de placenta
previa. Menos frecuentemente, los sangrados
pueden estar asociados a la invasión de la
vejiga, manifestándose a través de
hematuria.
17. No hay nada que una mujer puede hacer para
prevenir la placenta accreta, y es poco lo que
se puede hacer para el tratamiento una vez
que la placenta accreta se ha diagnosticado.
Por desgracia , la placenta accreta puede ser
lo suficientemente grave que puede ser
necesaria una histerectomía. Nuevamente, es
importante discutir las opciones quirúrgicas
con su proveedor de atención médica .
18. La placenta percreta es una enfermedad placentaria en la
que las vellosidades de este órgano se fijan completamente
a la pared uterina dificultando mucho su separación a la
hora del parto. En los casos más graves, tras atravesar todo
el grosor del miometrio y la serosa (últimas capas del
útero), invade órganos vecinos.
19. Dada la gravedad del trastorno, es
fundamental el diagnóstico oportuno para
realizar una planificación quirúrgica previa.
Hoy en día, gracias a los avances médicos y
al mayor conocimiento de esta enfermedad,
la placenta percreta se puede diagnosticar
durante la gestación, evitando así las
complicaciones imprevistas durante el parto.
20. En los últimos casos han surgido novedosos
tratamientos conservadores del útero que
pueden evitar su extirpación , estos
tratamientos no están exentos de riegos y
aun sigue en fase de estudio sobre todo en
casos de mayor adherencia a la placenta e
invasión de órganos cercanos .
El método consiste en dejar la placenta
entera o de manera parcial en su lugar y
conservar el útero, relegando la extirpación a
una 2da opción .