Este dominó enseña la relación entre alimentos y nutrientes de una manera divertida. Está destinado a estudiantes de cocina y restauración de 15 a 17 años. El juego consiste en ir colocando las piezas de dominó relacionando los alimentos con los nutrientes que aportan, como hidratos de carbono, lípidos, proteínas, vitaminas y minerales. Gana quien se quede sin fichas.

1. DOMINÓ DE LOS ALIMENTOS Y LOS NUTRIENTES
Objetivo:
Con este dominó se trabajará la relación entre alimentos y los nutrientes que nos
aportan. Una manera didáctica y divertida de aprender jugando.
Curso al que va destinado:
1º Formación profesional básica de cocina y restauración. Alumnado de entre 15 a 17
años.
¿Cómo jugar? (Instrucciones)
Preparación:
Jugarán 4 personas. Se colocan todas las piezas de dominó bocabajo en el centro de la
mesa. Se reparten 6 piezas por persona y las restantes se dejan bocabajo.
Ronda de juego:
1º Para empezar, la jugadora o el jugador número 1 pone una pieza en el centro,
bocarriba.
2º El de su derecha coloca una pieza que esté relacionada con el nutriente o el
alimento en cuestión. Los diferentes alimentos pueden aportar varios nutrientes por lo
que una ficha se podrá poner en diferentes situaciones.
3º Se van colocando todas las fichas.
4º Si alguien no tiene ficha que poner, roba una de las de la mesa que están bocabajo.
5º En el caso de que alguien ponga una ficha en el nutriente o el alimento incorrecto,
también tiene que robar una ficha extra.
6º Gana la partida quien se queda sin fichas.

2. Material
Fichas de dominó de alimentos y nutrientes.

3. AYUDA: ALIMENTOS SE PUEDEN ENLAZAR CON CADA NUTRIENTE.
Hidratos de carbono
Hay dos tipos de hidratos de carbono:
HIDRATOS DE CARBONO SIMPLES (azúcares): mermeladas, la miel y las frutas
(Mermelada, miel, manzana, pera, naranja, uva).
HIDRATOS DE CARBONO COMPLEJOS: verduras, hortalizas (calabacín, berenjena,
zanahoria, tomate), cereales (avena, arroz, pan) y leguminosas (lentejas, soja y
garbanzos).
Lípidos o grasas
Las grasas saturadas se encuentran fundamentalmente en la carne de animales
terrestres, tetrápodos (vaca, cerdo, cordero), en los huevos, la leche y en los
derivados de todos ellos. (costillas, chuletón, pollo, huevo, leche, queso, mantequilla)
El principal ácido graso monoinsaturado en nuestra dieta es el oleico, cuya principal
fuente es el aceite de oliva. (aceite de oliva)
Por último, los ácidos grasos poliinsaturados son abundantes en los aceites de semillas
(girasol, soja, maíz) y en el pescado. (Aguacate, nueces, salmón)
Proteínas
En general, los alimentos de mayor calidad proteica son el huevo (que se toma como
proteína patrón), el pescado, la carne y los lácteos. (Huevo, salmón, costillas, chuletón,
pollo, queso, mantequilla, leche)
Las proteínas vegetales son de menor calidad; las legumbres son pobres en un
determinado aminoácido esencial (metionina) y los cereales en otro (lisina).
(Garbanzo, lenteja, soja)

4. Vitaminas
Todos los alimentos contienen vitaminas. Frutas, verduras y hortalizas son
especialmente ricas en ellas. (Manzana, pera, naranja, kiwi y uva; calabacín, berenjena,
zanahoria, tomate, aguacate, espinacas, )
Minerales
Se han descrito 20 minerales esenciales para el hombre, entre los que destacan los
siguientes: calcio, fósforo, magnesio, sodio, potasio, cloro, azufre, hierro, cinc, yodo,
selenio, flúor, manganeso, cromo, cobre y molibdeno.
Las frutas, las verduras, y sobre todo las legumbres y frutos secos son muy ricos en
minerales. El calcio tiene su mejor fuente alimentaria en la leche y sus derivados, pero
también es abundante en los pescados que comemos con espinas, los frutos secos o
las verduras de hoja verde.
El hierro que nos aporta la carne y el pescado es de fácil absorción, pero el que
procede de los vegetales, como las legumbres o las verduras de hoja verde (espinacas,
acelgas), se absorbe y aprovecha peor. La ingesta conjunta de un alimento rico en
hierro y un alimento rico en vitamina C ayuda a la absorción de este mineral (ej. un
plato de lentejas acompañado, de postre por una naranja).
Los alimentos más ricos en sodio, en la dieta de los españoles, son los alimentos
precocinados, junto con los embutidos, el pan y el queso.