Este documento describe la anemia de la enfermedad crónica, que ocurre en pacientes con procesos infecciosos, neoplásicos o inflamatorios crónicos. La anemia se caracteriza por niveles bajos de hemoglobina, hipoferremia con saturación de transferrina disminuida, y reservas tisulares de hierro aumentadas. Se cree que factores inflamatorios como el TNF-alfa e IL-1 inhiben la producción de eritrocitos en la médula ósea y acortan la vida media de los hematíes.