El documento discute el problema del acoso escolar en España y posibles soluciones. Propone que para prevenir el acoso escolar se necesitan programas de competencias emocionales en las escuelas, protocolos claros para detectar y resolver casos de acoso, y la colaboración de toda la comunidad educativa, incluyendo directores, maestros, padres y el gobierno. También enfatiza la importancia de romper el miedo y estigma contra la denuncia del acoso para poder abordar el problema de manera efectiva.