Las conductas disruptivas en el aula pueden ser el resultado de características del niño, dificultades de aprendizaje o estilos educativos en el hogar. La detección temprana de estas causas a través de herramientas como díde puede ayudar a los profesionales a brindar el apoyo adecuado y prevenir problemas mayores. La coordinación entre familia y escuela es importante, al igual que el uso de estrategias por parte de los maestros como la planificación de clases interesantes y el fomento de la participación para prevenir