La dramatización es una técnica de representación de situaciones de la vida real por parte de un grupo de personas para comprender experiencias a través de la visualización y desarrollar habilidades de observación y análisis. Los grupos no deben ser de más de 20 personas y se requiere un espacio amplio. Las dramatizaciones mantienen la atención centrada en el problema representado y producen una vivencia común, analizando el problema desde las percepciones de los actores.