1. Características del pensamiento ecuatoriano antes del laicismo.
Se ha considerado al ex presidente de la republica del Ecuador Gabriel García Moreno como referente para
analizar las características del pensamiento ecuatoriano antes del laicismo.
Visión general
Luchó contra lo que él consideraba el regalismo, el regionalismo, el militarismo, la anarquía, la incultura y
el liberalismo ateo. Frenó la demagogia, incentivó la educación en todos los niveles de instrucción,
construyó carreteras y reorganizó la hacienda pública.
Suscribió un concordato con la Santa Sede en 1862, ratificado en 1863, comenzando de esta manera la
reforma del clero.
Dividió al Ecuador en provincias, lográndose así mejores resultados en los aspectos económicos,
administrativos, judiciales y educacionales.
Reprimió las revoluciones, incluso llegando a fusilar a varios conspiradores y anarquistas que buscaban
hacerse con el poder o intentaban desestabilizar al gobierno. Varios historiadores consideran esta "dureza"
como necesaria debido a que el país se encontraba en una situación apremiante después de la crisis que
atravesó y por la característica política inestable que asolaba al Ecuador desde su fundación como
república. Algunos autores consideran que abusó de su poder, pero también se resalta los varios indultos
que él concedió.
García Moreno buscó articular religión, modernidad y nación. Para eso, impulsó una reforma institucional
muy profunda para convertir a la Iglesia en un instrumento del Estado, reduciendo su papel social, y
concentrándola en lo que él consideraba la misión nacional específica de la Iglesia: la educación de las
nuevas generaciones.
Pensó que el clero era igual de indisciplinado que la mayor parte de las instituciones, por lo que procuró su
reforma de común acuerdo con la Santa Sede que posibilitó la organización territorial y administrativa de
la Iglesia, la creación de nuevas diócesis y la promoción del trabajo misionero, con la colaboración de
numerosas órdenes religiosas europeas.
Centralizó el sistema educativo entregando su administración a esas órdenes religiosas. García Moreno fue
Defensor de la Compañía de Jesús, a la que confió varias tareas en el área de la educación.
Se promovió la educación indígena, y la educación primaria se volvió obligatoria. Así, el número de niños
escolarizados en 1875 triplicó el de 1867.
Durante su gobierno se promovió la renovación de las devociones religiosas tradicionales y se buscó la
identificación de símbolos religiosos universales con la Nación. Se declaró patrona nacional a la Virgen de
la Merced en 1861, y se consagró oficialmente la Nación como «República del Sagrado Corazón» en 1873.
En 1869 se hace una Constitución a su medida. La Carta Negra o Garciana otorgaba al presidente amplios
poderes de decisión e injerencia sobre otros poderes de Estado, además de la obligatoriedad de ser católico
para ser ciudadano. Emprende entonces amplias reformas en el Estado, la tributación mejora y la economía
crece.
2. Segunda Constitución de García Moreno
Se expidió la octava Constitución de la República del Ecuador, denominada por los opositores como «la
carta negra», debido a que se aseguraba que la misma tenía una serie de disposiciones que atentaban
contra los derechos civiles y políticos de la población ecuatoriana. Cabe mencionar que esta logró un avance
significativo en el constitucionalismo ecuatoriano.
Las más novedosas disposiciones fueron:
Para ser ciudadano se requiere: Ser católico, saber leer y escribir, y ser casado o mayor de veintiún años.
Historiadores como Albán Gómez, Cevallos García, entre otros, manifiestan que para lograr comprender el
requerimiento de ser católico, se lo debe mirar desde la perspectiva del proyecto de consolidación nacional
trazado por el garcianismo, el cual requería del influjo de la Iglesia para establecer las bases progresistas
que su mentor deseaba para un país caracterizado por una tradición cristiana que se arraigaba desde la
época colonial. Además, la población del Ecuador de aquel entonces se declaraba en su mayoría católica
por lo que en realidad no se excluía a nadie de la ciudadanía.
El presidente de la República será elegido por voto secreto y directo de los ciudadanos en ejercicio.
El presidente de la República durará en sus funciones seis años. Podrá ser elegido para el período siguiente;
más para serlo por tercera vez, deberá mediar entre esta y la segunda elección el intervalo de un período.
Varios historiadores como Jorge Salvador Lara afirman que el verdadero progreso o salto a la modernidad
del Ecuador comenzó durante su segundo mandato. Consolidó el poder público y culminó varias obras
emprendidas en su primera administración. Una de ellas fue la Carretera Nacional. Empezó nuevas obras
públicas. Niñas, niños, hombres y mujeres, sin importar su condición o clase social, recibían la instrucción
en todos los niveles y ramos educativos que el Gobierno ofrecía de manera gratuita. La especialización
científica fue introducida en el país por primera vez.