El documento resume los avances y limitaciones del sistema educativo mexicano al final del porfiriato. Aunque se establecieron escuelas primarias y normales para formar maestros, y se desarrollaron instituciones de educación superior, la educación elemental no alcanzó a toda la población. Las ideas liberales difundidas por los maestros contribuyeron al descontento que llevó a la Revolución, allanando el camino para construir un sistema educativo nacional.