La hipertensión arterial sistémica es una enfermedad crónica de etiología multifactorial que se caracteriza por niveles elevados de presión arterial que aumentan el riesgo de eventos cardiovasculares. Afecta aproximadamente a 1 billón de personas a nivel mundial y es responsable de 7.1 millones de muertes al año. Su tratamiento incluye medidas no farmacológicas como cambios en la dieta y ejercicio, así como tratamiento farmacológico para reducir la morbimortalidad asociada a esta enfermedad.