La actividad busca que los niños aprendan a distinguir entre seres vivos y materia inanimada a través de un juego de clasificación. Se dividirá a los niños en equipos para que recojan imágenes y las peguen en las secciones correspondientes de una cartulina. Al final, cada equipo explicará su trabajo y todos revisarán los collages para reforzar la comprensión de la lección.