La posición de Trendelenburg invertido se utiliza en cirugías de cabeza y cuello, así como en procedimientos que comprometen el diafragma y la cavidad abdominal superior. Se recomienda el uso de apoyapiés para evitar deslizamientos y las abrazaderas de brazos y piernas deben estar correctamente colocadas. Las mesas quirúrgicas permiten colocar al paciente en diferentes posiciones e inclinaciones y cuentan con accesorios para inmovilizar partes del cuerpo.