Este documento define la cadena de frío como el sistema logístico que mantiene las vacunas en las condiciones óptimas de temperatura desde su fabricación hasta su aplicación. Explica que la cadena de frío consiste en tres niveles: central, regional y local. Cada nivel cuenta con los recursos adecuados como refrigeradores, cámaras frigoríficas y vehículos para almacenar y transportar los productos biológicos a las temperaturas requeridas y evitar que pierdan su efectividad.