La nariz está formada por el tabique nasal de hueso y cartílago, y las cavidades nasales contienen cornetes óseos y membranas mucosas. Los senos paranasales son cavidades neumáticas en los huesos del cráneo. La exploración de la nariz implica inspeccionar la forma, color y secreciones, y palpar la integridad de las estructuras y senos paranasales para detectar inflamación u obstrucción.