1. Tema 5. Las necesidades educativas especiales en la Educación Infantil o
Educación Primaria.
Mirian González Tamayo
Silvia Santamaría Merino
2. ÍNDICE:
1. Trastornos graves de conducta.
2. Clasificación.
2.1. Trastornos por déficit de atención y comportamiento perturbador.
2.1.1. Trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad.
2.1.2. Trastorno negativista desafiante.
2.1.3. Trastorno disocial.
2.2. Alteraciones conductuales secundarias a otros trastornos
mentales.
2.3. Patrones conductuales que pueden confundirse con los trastornos
graves de conducta.
3. 1. Trastornos graves de conducta.
Según Kazdin (1995), se trata de un patrón de comportamiento que se
mantienen a lo largo y la evolución del tiempo y que afecta a los derechos de los
demás, además de violentar las normas establecidas de la edad. Lo componen
sobre todo conductas que resultan inadecuadas para determinada edad y las
dificultades que se presentan continuamente en el niño en su entorno escolar,
familiar y/o social.
Hay que destacar que no todos los niños que cumplan los dos factores
mencionados anteriormente sufran de trastornos graves de conducta, sino que
lo que especialmente se mide dentro de esos síntomas es la intensidad y la
frecuencia con la que se da. Otro signo de alerta puede ser su aparición precoz.
2. Clasificación.
2.1. Trastornos por déficit de atención y comportamiento perturbador.
2.1.1. Trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad.
Es principalmente una condición especial del comportamiento, cuya
base es neurobiológica, que comienza en la infancia y cuyos síntomas
principales son la hiperactividad, la impulsividad y la falta de atención.
El hecho de que estas conductas se asocien entre sí, o al menos
algunas de ellas provoca otra serie de dificultades para el alumno tanto
en el rendimiento académico, como en sus relaciones y habilidades
sociales, en el autocontrol emocional, en el autoconcepto y la
autoestima.
Los subtipos del TDAH son: tipo con predominio del déficit de atención
(TDAH-DA), tipo con predominio hiperactivo-impulsivo (TDAH-HI) y
tipo combinado (TDAH-C).
2.1.2. Trastorno negativista desafiante.
Este trastorno se caracteriza por conductas no cooperativas, irritables,
desafiantes y negativas hacia toda aquella persona que tenga
autoridad sobre el niño, destacando principalmente a padres, madres
y profesores.
Cuando estos síntomas son muy frecuentes es cuando comienza a
repercutir en el aprendizaje de la persona. Es decir, es frecuente que
algunos niños pasen por esta etapa en su niñez o adolescencia, pero
cuando es algo pasajero no se le denomina con dicho término.
2.1.3. Trastorno disocial.
4. Se trata de comportamientos de niños y adolescentes que sobrepasan
los límites de lo que viene siendo la maldad infantil o la rebeldía
adolescente. Se deben sobre todo a situaciones o circunstancias que
están viviendo en un momento determinado en su entorno familiar,
social o escolar.
Algunos síntomas clave son las agresiones a otras personas,
fraudulencia o robo, daño hacia la propiedad de otros y grandes
violaciones de normas.
Su inicio puede darse en la etapa de infantil o en la etapa adolescente.
2.2. Alteraciones conductuales secundarias a otros trastornos
mentales.
2.3. Patrones conductuales que pueden confundirse con los trastornos
graves de conducta.
Es posible confundir conductas en el entorno escolar tales como:
conductas disruptivas, conductas agresivas, aislamiento, conductas de
inhibición social, déficit en habilidades sociales básicas, dificultades de
aprendizaje o conductas de acoso/maltrato, tales como el bullying.