Dos triángulos son semejantes si cumplen cualquiera de los siguientes criterios: (1) todos sus lados son proporcionales, (2) tienen los tres ángulos iguales, o (3) un ángulo igual y los dos lados que se inician en dicho vértice son proporcionales. Los triángulos semejantes comparten una relación de semejanza o similitud entre sus lados y ángulos.