Ute la estrategia en los emprendimientos sociales,la cultura organizacional en los emprendimientos sociales
1.
2. La importancia de tener una estrategia
clara radica en que establece una
dirección, indica el camino que se ha de
seguir y sirve de guía. Y, aunque luego
muchas veces la estrategia no se cumpla
en su totalidad, disponer de ella ayuda a la
organización a saber dónde está respecto
de dónde se había propuesto ir.
La estrategia de una organización se
puede definir como “la dirección y el
alcance de una organización a largo plazo,
que le permite conseguir ventajas a través
de la re-configuración de sus recursos en
un entorno cambiante, a fin de hacer frente
a las necesidades de los mercados y
satisfacer las expectativas de los grupos
de interés
La estrategia en los emprendimientos sociales
3. El objetivo de la estrategia para los emprendimientos sociales es garantizar la
creación de valor social y de valor económico; algunas veces esto significa la
sostenibilidad financiera, y otras, el refuerzo de la competitividad.
Consiste en unos objetivos principales, propósitos o metas, que se conjugan
en forma de políticas, líneas de actuación y planes explícitos para conseguir
estos fines, y que son desarrollados conscientemente y en coherencia con la
misión de la organización.
4. Proposición de valor, misión y valores
Una organización tiene una estrategia
coherente en la medida en que sus
políticas y planes de acción están bien
integrados con la misión de la
organización, y con los valores
fundamentales de la misma.
Lo que distingue a los emprendimientos
sociales es que su objetivo es crear valor
social. Para ser clara, la proposición de
valor debe anunciar a quién sirve el
emprendimiento y cómo se lo sirve, lo que
determinará en gran parte la estrategia de
la iniciativa.
5. Valores: la base de la organización
El tipo de estrategia y su grado de
elaboración, tanto en las empresas como en
las OSC, están relacionados no sólo con la
misión sino también con los valores de la
entidad; es decir, con las creencias y
preferencias compartidas que guían, motivan
y dan identidad a las organizaciones
Entre los valores comunes a la mayoría de
los emprendimientos sociales se encuentra
la sensibilidad por la injusticia social, la
preocupación por los más desfavorecidos,
por el medio ambiente y por las futuras
generaciones. También, implícita o
explícitamente, frecuentemente se
encuentra la voluntad transformadora de la
sociedad, es decir, la voluntad de crear
valor social.
6. Legitimidad y apoyo
Las empresas y las OSC comparten la
idea de que una parte importante de su
estrategia no sólo consiste en prestar
atención a clientes y donantes, sino
también a un público más amplio que
constituye el entorno que legitima su
actividad.
Las organizaciones también encuentran
una fuente de apoyo muy importante en la
coherencia que muestran en su misión.
Los emprendimientos sociales estudiados
tratan de alcanzar un difícil equilibrio entre
una misión que cambia constantemente, y
una cerrazón que no permite que esta
evolucione
7. La búsqueda de legitimidad en el entorno
El ajuste de la organización a su entorno es uno
de los objetivos centrales de la estrategia. Para
ello, la gestión estratégica requiere un análisis
del entorno: del entorno macro y del entorno
más inmediato de la empresa o entorno micro.
La habilidad de las organizaciones para
mantener la consistencia interna a pesar de los
cambios continuos en el entorno es un indicador
de su alto desempeño. Los efectos positivos de
este conocimiento del entorno son una mejor
gestión de los riesgos, más posibilidades de
acceder a recursos y, por supuesto, mejor
comprensión de las necesidades de los
beneficiarios del emprendimiento social.
8. La creación de capacidad operacional
Una de las funciones de la estrategia es
ayudar a las organizaciones a descartar o
dejar de lado algunas opciones. Al haber
decidido una estrategia, la organización puede
concentrarse en construir sus capacidades
operacionales básicas para conseguir
realmente una ventaja competitiva. La
estrategia afecta a la orientación a largo plazo
de la organización, y para ello es necesario
planificar.
Una de las fortalezas de los emprendimientos
sociales parece ser su habilidad de
complementar su capacidad de planificar y su
capacidad de soportar discontinuidades y
crear lo que ha sido llamado capacidad
operacional estratégica.
9. La creación de ventaja competitiva social
Muchas veces las decisiones estratégicas buscan cómo lograr ciertas ventajas
para la organización, por ejemplo respecto a otras organizaciones o a la
competencia. Esta ventaja competitiva puede consistir en muchas cosas
diferentes: lealtad de los clientes o destinatarios de los productos o servicios,
motivación de los empleados o voluntarios, reputación y visibilidad, relaciones
estrechas con proveedores, buenas relaciones con el entorno social y político,
etc. Esto, a su vez, permite reforzar la capacidad operacional y crear más valor
social y económico. Las empresas tratan de crear ventaja competitiva
mediante emprendimientos sociales que las ayuden a diferenciarse de la
competencia.
10. Lecciones para los emprendedores sociales
Debe haber coherencia entre la misión de la organización y la estrategia, y
alineación entre el foco estratégico y las capacidades organizacionales a fin de
aumentar las posibilidades de éxito de un emprendimiento social.
Una visión a largo plazo sobre lo que se quiere lograr con el emprendimiento
social permite realizarlo con mayor éxito.
La planificación estratégica refleja la presencia de una visión de largo plazo, pero
que una organización se rija por una planificación estratégica no debe cerrarla a la
posibilidad de asumir, en ciertos momentos, una estrategia emergente.
Es positivo involucrar a los beneficiarios en el análisis y la solución de los
problemas sociales.
La creación de una ventaja competitiva sostenible es un elemento importante en la
estrategia de los emprendimiento sociales y en el reforzamiento de su capacidad
operativa.
Es importante definir bien el alcance del emprendimiento social para no
diversificarse demasiado.
11. La cultura organizacional en los
emprendimientos sociales
La cultura es un elemento fundamental para comprender el desempeño de
cualquier tipo de organización. Ella se manifiesta en los patrones de
conducta adoptados por las personas, tanto en el cumplimiento de sus
funciones como en las relaciones establecidas. La cultura organizacional es
percibida, por ejemplo, cuando se identifican las características
predominantes en la interrelación entre jefes y subordinados. es natural que
se procure identificar en los emprendimientos sociales investigados qué
patrones culturales se evidencian y cómo se presentan en las diversas
esferas de la vida de la institución.
12. Fundamentos conceptuales para el análisis de la cultura de las
organizaciones
Para que sea posible administrar los
patrones culturales en las organizaciones
es preciso identificarlos y comprenderlos.
algunos se manifiestan de forma más
visible y son interpretados con facilidad,
otros rasgos culturales son menos visibles,
aunque ejercen una fuerte influencia sobre
el desempeño en las organizaciones
Es importante que el gestor de emprendimientos
sociales desarrolle habilidades para identificar los
patrones de cultura que se manifiestan de forma
predominante en esas diversas dimensiones. Esta
sensibilidad del gestor para comprender los
patrones culturales es requisito esencial para que él
pueda administrar tanto las características
evidentes como aquellas menos visibles.
13. Dimensiones culturales más influyentes en los emprendimientos
sociales
En emprendimientos sociales conducidos
por empresas, el principal impulso
generador proviene del medio externo, y
es el factor determinante para que el
gestor tome la decisión de emprender
una iniciativa con finalidades sociales.
Los emprendimientos sociales conducidos
por OSC tienen su origen
preponderantemente relacionado con
valores de carácter religioso, filosófico,
político e ideológico, los cuales presentan
fuerte conexión con la causa social que es
objeto de la acción emprendedora.
14. • Procesos de gestión, en los que se evidencian los patrones
predominantes en las relaciones interpersonales y en las formas de
estructuración de los procesos de trabajo.
• Ejercicio del liderazgo, cuyos estilos predominantes indican los
fundamentos de la autoridad.
• Sistemas de comunicación, donde se identifican patrones de
mayor o menor transparencia de las relaciones.
• Procesos de toma de decisiones, que indican los criterios
subyacentes a la distribución de poder formal e informal.
15. La cultura de los emprendimientos sociales vinculados a las
empresas
Los patrones culturales presentes en
emprendimientos sociales conducidos
por empresas son moldeados a partir de
un hecho del contexto externo que
desencadena una reacción puntual,
limitada y no prevista por la cultura y por
la estrategia empresarial.
Las manifestaciones organizadas de las
comunidades vecinas a la organización y
las movilizaciones internas de carácter
reivindicatorio se configuran, en algunos
casos, como incidentes críticos que
desencadenan un cambio de conducta de
las empresas respecto a su
posicionamiento en cuestiones sociales.
16. Es posible identificar en los emprendimientos sociales creados por
empresas una secuencia de fases de aprendizaje organizacional que
propician el cambio o el fortalecimiento de ciertos patrones de su
cultura:
• Reacción y adecuación a presiones externas y a la legislación y
normas de gestión ambiental y social.
• Conocimiento más profundo de los grupos de interés en lo que se
refiere a sus derechos y a los problemas que los afectan.
• Desarrollo de la percepción de los problemas y carencias sociales por
parte de la administración y del cuerpo de colaboradores de la
empresa; y estímulo a su compromiso con acciones sociales.
• Toma de conciencia de la sinergia existente entre las estrategias de
actuación social y las de actuación empresarial, y de las
contradicciones que pueden encontrarse en los sistemas de gestión.
17. La influencia de los patrones culturales presentes en los procesos de
gestión
Son clasificados como procesos de gestión
la planificación, implementación,
evaluación y control de los
emprendimientos sociales, así como su
estructuración en actividades técnicas y
operacionales conducidas individualmente,
o a través de redes de organizaciones
sociales, a fin de alcanzar los resultados
para los cuales tales emprendimientos
fueron creados.
Un patrón cultural predominante en estos casos es adoptar en los
emprendimientos sociales de las empresas tecnologías de gestión semejantes a
las usadas en sus prácticas habituales de negocios, tales como el foco en los
resultados, la precisión en la definición de proyectos, la profesionalización del
equipo, la optimización de los recursos y los controles administrativos y
financieros.
18. La influencia de los patrones culturales preponderantes en los sistemas
de comunicación
Los patrones culturales asociados a la
delegación de atribuciones y
responsabilidades La configuración de los
sistemas de comunicación interna parece
ejercer una significativa influencia sobre la
absorción de la cultura de responsabilidad
social. Esta va de la mano de una
definición clara y extendida de metas y
objetivos, tanto los que se refieren a la
producción y al negocio de la empresa
como aquellos relacionados con su
actuación social. se relacionan con la
forma en que se conciben y gestionan los
sistemas de comunicación de la empresa.
19. Reflexiones finales
La conclusión más general del análisis de patrones culturales de los
emprendimientos sociales es que los gestores deben desarrollar las
competencias y habilidades que les permitirán identificar los patrones
culturales preponderantes y dirigir sus acciones hacia el fortalecimiento
de aquellos que ejercen una directa y positiva influencia en el
desempeño de la organización.
Es de resaltar que la valorización de los procesos de aprendizaje
constituye uno de los elementos esenciales para la gestión de los
aspectos culturales de las organizaciones en general
La adopción de modelos de gestión participativa y de alianzas
intersectoriales, que integran el proceso de toma de decisiones entre las
autoridades instituidas y grupos de interés externos, contribuye al
fortalecimiento de esos patrones culturales, y de ese modo, a un mejor
desempeño organizacional.