Este documento contiene dos artículos relacionados con la educación. El primero analiza las dimensiones poco argumentadas de la denominada problemática de la "deserción" escolar desde una perspectiva crítica. El segundo discute la práctica olvidada de la autoevaluación estudiantil, su importancia y objetivos. Ambos artículos exploran formas alternativas de abordar estos temas educativos más allá de las perspectivas tradicionales.
1. La “deserción” escolar:
un acercamiento crítico a las dimensiones poco
argumentadas de la denominada problemática
Autor: David López-Garay y Samuel Colón De La Rosa
La autoevaluación estudiantil: una práctica olvidada
Evelyn Ortiz Hernández
EDUC 631-Administración y Supervisión Escolar como Modelo de Conducta Organizacional
Profesora Dra. Migdalia Rosado
Trimestre Agosto-Octubre 2011
Sábado / 8:00am -12:00m
Los Artículos Finales
Preparado por:
Efraín Suárez Arce
01588944
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La “deserción” escolar: un acercamiento crítico a las dimensiones
poco argumentadas de la denominada problemática
Este articulo comienza desde un punto histórico sobre como surge la
escuela moderna y el desarrollo de nuestro sistema educativo. Se busca
examinar las alternativas presentadas ante la deserción escolar en un
folleto titulado Abandono escolar:¿Qué opciones tenemos para estimular
el potencial de la juventud? que se basa en una investigación.
La escuela moderna, siempre ha funcionado como institución de iniciación
social y de educación un lugar de control físico y un espacio de
entrenamiento ideológico de los lugares sociales de cada persona.
Obviamente, el control y buen encaminamiento de los/as estudiantes es
central para el funcionamiento de la escuela como institución disciplinaria.
Los autores señalan que esta dimensión de la escuela como una
institución de control, debe estar presente en nuestras reflexiones sobre el
llamado problema de la “deserción” escolar. No todos/as logramos un
acoplamiento tan sencillo a instituciones de control disciplinario y
conductual. Yo digo que esto es solo porque algunos no tienen buenos
modelos en sus hogares. Si no logras acoplarte a lo que la sociedad
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espera de ti, terminaras en otra institución de control disciplinario y
conductual.
Los autores dicen que la educación técnica, con el único objetivo del
empleo especializado debe ser una decisión de cada persona, según sus
circunstancias particulares, en vez de una imposiciónsistemática por parte
del estado. Pero entonces yo tengo la alternativa de no ser productivo y
vivir del mantengo, lo cual si hay muchos como yo, se convierte en una
imposición sistemática hacia el estado y sus recursos. Los autores
mencionan a la pedagogía crítica para la producción de conocimientos,
valores y relaciones sociales que participen en la sociedad en sus
procesos. Ellos prefieren el fortalecimiento de programas holísticos,
programas que estimulen la comunicación entre las comunidades y las
escuelas, y la promoción de cursos o espacios alternativos de diálogos y
experiencias de vida en las escuelas. Yo tomo todo esto con una pizca de
sal, al ver con mis propios ojos como los estudiantes llegan hasta la
adultez sin dominar las destrezas básicas de español, matemáticas,
ciencias, etc.. El darle pensamiento crítico a alguien asi solo crea focas
entrenadas, barrenderos que hablan sobre las relaciones de poderpolítico-
económicas y analfabetas funcionales.
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En lugar de contextualizar la educación“posibilitando el vencimiento de las
barreras características delmodelo de educaciónimpuesto a principios del
siglo XX y que aún están vigentes”,prefiero hacer posible la adquisición de
conocimientos que posibiliten el hacerse un espacio en la sociedad formal
y respetable y vivir en paz consigo mismo. (THIS IS SUCH ARROGANT
PRATTLE)La educación NO es un proceso democrático y colaborativo, el
estudiante aprende lo que se espera del como ente social y la conducta
que se espera de el. El desarrollo del pensamiento crítico en la
Universidad surge después que pases por este proceso de socialización,
disciplina y conducta.
Los autores rechazan la idea de “restaurar el orden y la disciplina” en las
escuelas porque parte de la premisa de que el modelo educativo actual es
el correcto para todo/a joven. “Se asume que este modelo es el que
todos/as deben aceptar e integrarse satisfactoriamente (inclusive de
manera involuntaria). Cualquier desviación es pensada en el registro de lo
negativo y se exhorta a intervenir de inmediato.” Crearemos un modelo
“LaissezFaire” que se adapte a cada nota discordante? La implementación
de medidas dirigidas hacia la “retención” y la “obediencia”, en lugar de
“culpabilizar” al/la joven “por sus circunstancias” le fija responsabilidades
por sus actos y crea consciencia sobre las ramificaciones de estos. El
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supervisar y establecer normas claras y consecuencias es llamado “un
constante estado de vigilancia y persecución (que) puede posibilitar
dinámicas sociales en las cuales un/una estudiante puede sentirse con
aversión hacia el sistema educativo. Esto, en vez de posibilitar una
invitación al aula, podría manifestar una acción de repudio a la escuela.”
En todo caso lo que he visto es aversión hacia el seguir normas e
interactuar en forma positiva con los demás y acciones de repudio a las
figuras de autoridad.
La autoevaluación estudiantil: una práctica olvidada
Evelyn Ortiz Hernández
Este artículo discute la autoevaluación del estudiante, su importancia y sus
objetivos. Se examinan las opiniones y las investigaciones que se han hecho sobre
su efectividad. Luego se presenta el rol del maestro y el de del estudiante.
Finalmente, se presentan los pasos para llevar a cabo esta forma de evaluación, que
según la autora ha sido olvidada.
(Mi trabajo me ha hecho un cinico…)
“Si cada vez que se evalúa un estudiante se pensara en las implicaciones que tienen
las decisiones que se toman, es posible que los resultados fueran muy diferentes.”
Oh claro que si. Haría como algunos maestros que en lugar de educar quieren
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facilitarle las cosas al estudiante y hacerse la vida mas fácil ellos. ¿Acaso nadie
entiende que al impedir que el estudiante tenga que trabajar, solo lo estas
preparando para que caiga mas adelante?
El articulo propone al autoevaluación como un “aspecto fundamental del proceso
de aprendizaje” y nos dice que el hecho de que el alumno reflexione acerca de su
desempeño y sus resultados, y se asigne a sí mismo una nota puede “impactar
grandemente la imagen que tiene de sí mismo y lo ayuda a concluir qué
modificaciones debe hacer para mejorar sus resultados.” La idea es que alumno
asume la responsabilidad ante su propia formación, lo cual para mi es tan absurdo
como darles las llaves de mi auto a un niño para que este asuma la responsabilidad
ante aprender a conducir. Ellos dicen “autoregulación”, “autonomía personal”, y
“autoeficacia” y yo digo “laissez faire”.
Las técnicas para la autoevaluación presentadas son rubricas y portafolio y diario
reflexivo (“Freedom Writers”) donde el maestro se convertirá en mentor,
orientador, y facilitador en la búsqueda y perfeccionamiento del conocimiento.
Yo modificaría esta idea un poco. Cuando un estudiante se convierte en participe
de su propio proceso de enseñanza-aprendizaje bajo la tutela de un maestro estos
adquieren una mejor perspectiva de ellos mismos como lectores, escritores y
pensadores. Segun reflexionan sobre lo que han aprendido y de qué manera lo han
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adquirido, desarrollan estrategias que les permiten convertirse en aprendices más
efectivos. Las observaciones y reflexiones del estudiante puede darles buenas ideas
al maestro para refinar o reevaluar su plan de enseñanza. Esto podría ser parte de
uno de los programas holísticos mencionados en el artículo anterior y que
despiertan en mi tanta desconfianza. La idea es mejorar los procesos cognoscitivos
del estudiante y fortalecer y ampliar sus expectativas y ejecuciones.
Me intriga la idea mencionada de una labor educativa que se centra en el
aprendizaje y no en la enseñanza, asi que tendre que leer mas sobre esto.