Los números enteros incluyen todos los números naturales y sus opuestos, formando un conjunto infinito en ambas direcciones. Surgen para representar cantidades en situaciones de la vida cotidiana como deudas y temperaturas. Se pueden sumar, restar, multiplicar y dividir siguiendo reglas como la de los signos y propiedades como la conmutativa y distributiva. El orden de las operaciones especifica realizar primero los paréntesis, luego las multiplicaciones y divisiones de izquierda a derecha, y finalmente sumas y restas.