1. “Maltrato Infantil y Abuso Sexual en niños”
Dra. Claudia Tejeda Romero
Medico Psiquiatra y Paidopsiquiatra
2. En la actualidad se consideran cinco
tipos diferentes de maltrato:
• 1) Abuso físico
(maltrato físico activo):
acción no accidental
llevada a cabo por un
adulto encargado de
cuidar al niño, que le
produce daño físico o
que le sitúa en riesgo de
sufrirlo.
3. • 2) Abuso emocional (maltrato emocional activo):
acción no accidental, llevada a cabo por un adulto
encargado de cuidar al niño, de naturaleza
psicológicamente destructiva y que deteriora
gravemente el desarrollo psicológico del niño, o que
representa un grave riesgo para ello. Incluye:
hostilidad, rechazo crónico, corrupción, aterrorizar al
niño/a, etc.
4. • 3) Negligencia física (maltrato físico
pasivo): persistente falta de atención de las
necesidades físicas del niño (alimentación,
vestido, higiene, vigilancia médica, …) por
parte de los adultos encargados de su
cuidado.
5. • 4) Negligencia o
abandono emocional
(maltrato emocional
pasivo): persistente falta
de atención a las
necesidades psicológicas
del niño (seguridad,
afecto, …) por parte de los
adultos encargados de su
cuidado.
• Incluye: falta continuada
de disponibilidad
psicológica e interés hacia
el niño, falta repetida de
respuesta a las conductas
iniciadas por el niño, …
6. • 5) Abuso sexual:
cualquier acción de
tipo sexual (que
transgrede los tabúes
existentes en ese
sentido en una
determinada sociedad)
por parte de un adulto
hacia un niño.
7. Definición
• Desde 1978 el National
Center of Child Abuse
and Neglect propone
que se considere como
AS a los “contactos e
interacciones entre un
niño y un adulto,
cuando el adulto usa al
niño para estimularse
sexualmente él mismo,
al niño o a otra persona.
8. • El abuso sexual puede ser cometido por un
menor de 18 años cuándo este es
significativamente mayor que el niño o
cuando el agresor está en una posición de
poder o de control sobre otro”.
9. • En el caso de menores debe considerarse como
“cualquier clase de placer sexual con un niño por
parte de un adulto desde una posición de poder o
autoridad.
• No es necesario que exista un contacto físico (en
forma de penetración o tocamientos) para
considerar que existe abuso sino que puede
utilizarse al niño como objeto de estimulación
sexual, se incluye aquí el incesto, la violación, la
vejación sexual (tocamiento/manoseo a un niño
con o sin ropa, alentar, forzar o permitir a un niño
que toque de manera inapropiada al adulto)
•
10. • y el abuso sexual sin
contacto físico
(seducción verbal,
solicitud indecente,
exposición de órganos
sexuales a un niño para
obtener gratificación
sexual, realización del
acto sexual en
presencia de un menor,
masturbación en
presencia de un niño,
pornografía...)”.
11. • En México no se cuenta con datos estadísticos
reales sobre el AS.
• El Centro de Terapia y Apoyo para Víctimas de la
Procuraduría General de Justicia del Distrito
Federal (1997) reporta que de las víctimas
menores de 13 años el 52% eran víctimas de
abuso sexual (el 31% víctimas de violación y el
70% de todos los menores tratados eran niñas).
En 1999 el Sistema Nacional para el Desarrollo
Integral de la Familia (DIF) atendió a 24,927 niñas
y niños maltratados, de los cuales 12,219 eran
niñas y 12,916 eran niños
12. • Una encuesta reciente en el Distrito Federal realizada por el
Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática
(INEGI), muestra que la violencia intrafamiliar tiene lugar en
30.4% de todos los hogares (uno de cada tres) en la forma
de maltrato emocional, intimidación o abuso físico o sexual.
El maltrato emocional ocurre en casi todos estos hogares y
el abuso sexual en 1.1%.
• Se calcula que en el 2003 un 90% de los niños y niñas que
viven en las calles de ciudad de México han sido víctimas
de abuso sexual en algún momento de sus vidas (UNICEF).
En un reporte publicado por el INEGI el 30 de abril del 2004
se comprobó el maltrato infantil en 13,332 casos; de estos
el 4.7% fueron atendidos por AS
13. • México registra altos
índices de abuso sexual
infantil, en donde el
77% de las víctimas son
niñas y el promedio de
edad de los afectados
es de 5.7 años (UNAM),
• En todos los casos la
víctima conocía al
agresor: el hermano en
19%; el padrastro en el
18%; el tío en un 16% y
el padre en un 15%.
14. INDICADORES
Físicos:
• Dificultades al caminar o sentarse;
• Ropa interior manchada o ensangrentada;
• Dolor o comezón en el área genital;
• Moretones o sangrado en áreas genitales o
perianales;
• En algunos casos, la presencia de infecciones
de transmisión sexual.
15. Factores de Riesgo
•
• Psicológicos:
• cambios radicales en el
comportamiento;
• exagerada curiosidad
sobre temas de sexuales;
• conducta infantil;
• evitan a determinadas
personas o lugares;
• interés poco usual en, o el
evitar, todo lo de naturaleza
sexual,
• problemas con el dormir o
pesadillas,
16. Factores de Riesgo
• depresión o aislamiento de
sus amigos y familia,
• decir que tienen el
cuerpo sucio o dañado,
• negarse a ir a la
escuela,
• problemas de
conducta,
• evidencia de abusos o
molestias sexuales en sus
dibujos, juegos o fantasías,
• agresividad rara o poco
común.
17. FACTORES DE RIESGO
• El hecho de ser niña (mujer) es, indudablemente,
uno de los factores que hace mucho más probable
llegar a ser víctima de abusos sexuales (3 niñas por 1
niño).
• Los abusos sexuales se dan en niños y niñas de todas
las edades, pero se producen con más frecuencia entre
los 3 y los 10 años.
• Las condiciones que favorecen el uso de la violencia
con los niños están también asociadas a un mayor
riesgo de sufrir abusos sexuales: pobreza, bajo nivel
cultural, viviendas inadecuadas, abuso del alcohol.
18. Situaciones familiares como:
• Ausencia de los padres
biológicos.
• Incapacidad o enfermedad de la
madre.
• Los conflictos entre los padres
(indiferencia, enfados, peleas,
separaciones y divorcios).
• Las relaciones pobres, escasas o
deficitarias por algún motivo con
los padres.
• El hecho de tener padrastro.
19. CARACTERÍSTICAS DEL AGRESOR
• Los agresores son mayoritariamente varones (80 a 90%), pueden ser
hombres adultos y jóvenes, incluyendo adolescentes.
• Habitualmente eligen víctimas del otro sexo.
• El 50% tienen su primer comportamiento de abuso antes de cumplir 16
años.
• Aparentemente son personas normales, pero presentan problemas de
socialización y serias carencias en valores sociales.
20. • En el 90% de los casos se
trata de familiares o
conocidos de las víctimas.
• El 10% de los casos usan la
violencia. Habitualmente
recurren al engaño, tratan
de ganarse la confianza de
las víctimas o se aprovechan
de la confianza familiar,
utilizan estrategias como el
factor sorpresa, les
amenazan o les dan
premios o privilegios de
diferente tipo.
21. TRATAMIENTO
• En la mayoría de los casos se
requiere de un grupo de trabajo
multi e interdisciplinario,
formado por:
• Niños.
• Padres
• Medicina del adolescente.
• Psicología infantil.
• Psiquiatría infantil y del
adolescente.
• Terapia familiar.
• Trabajo social.
• Asesoría legal.
• Escuela.
22. PREVENCIÓN
• Es necesario enseñar a las niñas y
a los niños a que desarrollen
límites respecto al afecto y la
privacidad.
• Es conveniente decirles que
nadie debe tocarlos en sus
genitales (vulva, pene, testículos),
región perianal (nalgas), pechos,
etc.
• Es mejor usar nombres
específicos cuando se habla de
genitales en vez de eufemismos
(palomita, pirrín, pajarito, cosita,
etc).
23. • Si alguien intenta tocarlos (manosearlos) lo
comunique de inmediato a su madre, a su
padre, una maestra o cualquier persona de su
confianza, pero el mensaje debe manifestar el
deseo de ayudar y no encerrar una amenaza.
24. En los casos en los que ya haya sucedió
el AS se recomienda:
•
• Creerle al niño. No hay que cuestionar la veracidad de los
hechos porque cuando los niños cuentan un abuso, no
mienten.
• Decirle que no es culpable. Casi siempre muestran
sentimientos de culpabilidad, por lo que es muy importante
dejarle claro que él no tiene ninguna culpa, que el
responsable es el agresor ("Tú no has hecho nada malo",
"No es tu culpa", "Tú no has podido evitarlo).
• Asegurarle que no le ocurrirá nada, que el abuso no se
repetirá y no habrá represalias ("Ahora que me lo has
contado, ya no volverá a suceder").
25. Existen cosas que nunca deberíamos
hacer. Como por ejemplo:
• Culpar al niño del abuso. No hay que castigarle por lo
sucedido incluso en los casos en los que el agresor ha
logrado que colabore.
• Nunca hay que abordarle con preguntas como: "¿Por qué
le dejaste hacerlo?", "¿Por qué no me lo dijiste antes?",
"¿Por qué no dijiste no, huiste o luchaste".
• "Las víctimas nunca tienen la culpa. La culpa es siempre
del agresor".
• Negar que el abuso ha ocurrido ("¿Estás seguro/a?", "No
es verdad, debe ser un malentendido", "No inventes esas
historias").
26. • Expresar alarma:
angustia por el niño/a o
por el agresor.
• Tratar al niño/a de
forma diferente. Evitar
tocarle, acariciarle,
hablar de él o ella como
la víctima.
• Sobreprotegerle.
27. • Un niño se paseaba por la playa.
• La marea había arrojado a la arena cientos y cientos de
estrellas de mar que bajo los rayos del sol empezaban a
morir. El niño recogía una tras otra y las tiraba hacia
las olas.
• Un hombre pasó y le preguntó lo que hacía.
• El pequeño explicó que las devolvía al mar para que no
murieran.
• El hombre sonrió burlón y dijo:
• ¿No te das cuenta que son cientos de cientos?
• El niño alzó una estrella, la miró con ternura y mientras
la lanzaba a las olas salvadoras respondió:
• No podré atender a todas pero para ésta ya su suerte
ha cambiado.