2. ESTA INFUSION SE PREPARA CON YERBA MATE Y AGUA. EL MATE ES LA BEBIDA TIPICA DE LA REGION DEL RIO DE LA PLATA LAS FORMAS DE TOMAR UN MATE PUEDE SER SI AZÚCAR, AL QUE SE LO DENOMINA “AMARGO“, “CIMARRÓN" o “VERDE". “MATE DULCE“ ES AQUEL QUE TIENE AZÚCAR. EL “TERERE“ ES EL MATE AMARGO CEBADO CON AGUA FRIA.
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4. ¿COMO CURAR EL MATE? El curado del mate es muy importante porque elimina los pigmentos que tienen algunas maderas y que dan mal sabor al mate y sella lo poros para evitar que se generen malos olores y/o sabores. Lo primero es darle una buena lavada. Después tenés que llenarlo con agua caliente, dejarlo reposar 1 o 2 minutos y luego tirar el agua. Repetir esta última operación hasta que el agua que sale esté limpia, sin ningún tipo de color. El paso siguiente es llenar el mate de yerba casi hasta arriba y ponerle agua caliente hasta el tope. Esto lo hacés a la noche y lo dejás así hasta el día siguiente. Al otro día le sacás esa yerba, lo enjuagás y lo ponés boca abajo para que se oreé durante el día. Repetir esta operación tres o cuatro días. Ya está listo para cebar.
5. EL MATE : BEBIDA NACIONAL El Senado de la Nación aprobó el proyecto que establece la declaración del Mate como Bebida Nacional. La buena noticia se enmarca en la conmemoración del Bicentenario de la República Argentina. La propuesta presentada por el senador misionero Eduardo Torres, se fundamenta en que se trata de una infusión arraigada en la historia y cultura de los argentinos, con cientos de años de vigencia y en progresiva expansión. EL MATE ALUSIVO AL BICENTENARIO.
6. NUESTRA SEÑORA GAUCHA DEL MATE Esta advocación no tiene su origen en una aparición o un hecho milagroso, sino que nació para cristalizar el amor que los argentinos sentimos por esta bebida que nos permite compartir charlas y buenos momentos. Un grupo de laicos y sacerdotes de la provincia de Misiones patrocinaron la idea de que la Iglesia reconozca una nueva advocación de María bajo el nombre de Nuestra Señora Gaucha del Mate, y la entronice como patrona del MERCOSUR. El presbítero Domingo Lancellotti, uno de los promotores de esta idea, dijo: "esta nueva imagen de la Virgen, de ropas comunes y simples, con el cotidiano gesto de servir un mate al lado del brasero... se instala a primera vista en el corazón de cualquier cristiano de estas tierras, que entiende como nadie la solidaridad y la comunión que el mismo encierra... y es inmediato el afecto que la gente siente ante la bella y querible imagen de la Virgen Gaucha del Mate..."