2. ¿Qué es el desarrollo rural?
El desarrollo rural es un proceso localizado de cambio social y crecimiento
económico sostenible, que tiene por finalidad el progreso permanente de la
comunidad rural y de cada individuo integrado en ella (VALCÁRCEL-RESALTS,1992).
Este tipo de desarrollo busca la mejora de las condiciones de vida de los habitantes
de los espacios rurales (GÓMEZ OREA, 2002) fija como objetivos la mejora de su
calidad de vida, el incremento de los niveles de renta, la mejora en las condiciones
sociales, de trabajo y del medio ambiente.
El desarrollo rural busca la conservación del entorno y el uso de técnicas y sistema
de producción respetuosos con el legado histórico y la propia condición del medio
natural.
Además, pretende reestructurar el sistema económico rural mediante estrategias
de desarrollo empresarial basado en las capacidades del territorio.
3. La agricultura en el desarrollo
La agricultura ha sido motor de crecimiento en las etapas tempranas del
proceso de desarrollo y fuerza fundamental para la reducción de la pobreza.
Es así, como la gran participación de la agricultura en las economías más
pobres, indica que un incremento de este sector es crítico para impulsar el
crecimiento económico en general. Por otra parte, las grandes y persistentes
brechas entre la participación de la agricultura en el PIB y en el empleo,
sugieren que la pobreza está concentrada en la agricultura y en la zona rural y
que, en la medida en que el crecimiento de los sectores no agrícolas se
acelera, muchos de los pobres rurales siguen siendo pobres.
Así mismo, la concentración de la pobreza (absoluta y relativa) en áreas
rurales ilustra la dificultad para redistribuir el ingreso generado fuera de la
agricultura y la profunda inercia en la transformación ocupacional de las
personas, conforme las economías se reestructuran.
4. La agricultura en el desarrollo
Para el análisis de la relación entre agricultura y desarrollo, nos
concentraremos en dos situaciones: 1) Los Bienes Públicos y capital básico para
la agricultura y 2) La clasificación de países de acuerdo a su crecimiento en el
sector.
Los bienes públicos y capital básico para la agricultura
Los bienes públicos por definición son una concepción de la teoría económica,
sin embargo esta definición en la práctica conlleva dificultades en los procesos
de provisión y de sostenibilidad de los recursos especialmente cuando deben
ser provistos para el desarrollo de la agricultura.
El término `bienes públicos' por lo general se asocia con las estructuras físicas,
como caminos, hospitales, y puertos (FAO, 2001). También pueden ser no
físicos, como por ejemplo la información.
5. La agricultura en el desarrollo
No obstante, esta definición en la práctica conlleva diversas dificultades en los
procesos de provisión y de sostenibilidad de los recursos especialmente cuando
deben ser provistos para el desarrollo de la agricultura, por consiguiente se propone
en un sentido más amplio virar el concepto de bienes públicos a capital básico,
siendo este el conjunto de bienes que provee servicios para el bienestar de la
población y que sirve de apoyo a la operación de la inversión privada (Juan José
Perfetti, 2013).
El capital básico tiene como fin mejorar las condiciones de vida de la población
rural y potenciar la productividad de las inversiones privadas que son motor del
crecimiento, y la diversificación de la producción agrícola (Juan José Perfetti,
2013).
6. La agricultura en el desarrollo
El impulso del capital básico en la agricultura busca mejorar las condiciones del
desarrollo rural, que tiene como reto disminuir las desigualdades, optimizar la
distribución del ingreso, prevenir la sobreexplotación de los recursos naturales,
acrecentar la acumulación del capital humano y del capital social, construir una
democracia eficaz y promover una institucionalidad que defienda esos objetivos y
que introduzca correctivos cuando esos propósitos se pongan en peligro (Juan José
Perfetti, 2013).
En concordancia, el capital básico requerido para la construcción de políticas
públicas de desarrollo agrícola debe focalizarse hacia la inversión en los siguientes
aspectos:
• Capital humano y formación para el trabajo.
• Riego y adecuación de tierras.
• Asistencia técnica
• Política fitosanitaria
• Información
• Provisión de Servicios Financieros
• Infraestructura vial
7. La agricultura en el desarrollo
Análisis a partir de la clasificación de países:
Esta clasificación se ha hecho a partir del porcentaje del crecimiento que se
origina en la agricultura y de la proporción de la pobreza en general (US$2,15
por día) en el sector rural.
En los países agrícolas, la agricultura representó alrededor de una tercera
parte del crecimiento total durante las décadas del 90 y del 2000. Más de
quinientos millones de personas viven en estos países, 49% de ellas con menos
de US$1 por día y 68% en las zonas rurales. En estos países, el sector de
cultivos alimenticios es típicamente el sector más grande y produce
fundamentalmente para el mercado doméstico (bienes no transables). Por otro
lado, el sector de cultivos no alimenticios, produce para la exportación y es
con frecuencia dominado por productos tradicionales, (bienes transables).
8. La agricultura en el desarrollo
En los países en transformación, la agricultura contribuyó únicamente con 7%
al crecimiento durante el mismo periodo, ésta aun representa alrededor del
30% de la economía y emplea el 57% de la fuerza de trabajo. A pesar del rápido
crecimiento y la disminución de las tasas de pobreza en muchos de estos
países, la pobreza sigue siendo extendida y es esencialmente rural.
Igualmente, los recursos naturales están cayendo bajo una creciente presión
por la agricultura y sufren por la competencia por la tierra y el agua. Además,
se caracterizan por la amplia brecha entre los ingresos rurales y urbanos.
Los países urbanizados, cuentan con una agricultura que representa
únicamente el 6% de las economías urbanizadas y contribuye más o menos
proporcionalmente al crecimiento, pero los agronegocios, la industria
alimentaria y los servicios pueden representar alrededor del 30% del PIB.
9. Conclusiones
Aunque casi tres cuartas partes de la población de los países urbanizados viven en áreas
urbanas, 45% de los pobres está en zonas rurales y 18% de la fuerza de trabajo aún
labora en la agricultura. En estos países, la agricultura actúa como cualquier otro
sector transable, siendo con frecuencia económicamente importante en subregiones
específicas.
A través del análisis se ha evidenciado que la conexión entre agricultura y desarrollo,
no ha sido ampliamente explotada puesto que el crecimiento de la productividad
agrícola es intrínsecamente lento, las políticas macroeconómicas, de precios y
comercial, discriminan indebidamente a la agricultura y existe un sesgo urbano en la
asignación de la inversión pública.
También, hay una mala inversión al interior del sector y la ayuda oficial para el
desarrollo, dirigida al sector, ha declinado. Ante esta situación, se presenta como
desafío una mejor comprensión de la política agrícola para enfrentar la continuación
del rechazo, la subinversión y la mala inversión en el sector, buscando que el proceso
de toma de decisiones sea resultado de una negociación política entre los políticos y
sus ciudadanos, impulsando su potencial en la reducción de la pobreza y en el
crecimiento de los países agrícolas.
10. Bibliografía
Banco Mundial. Informe sobre Desarrollo Mundial 2008: agricultura para el desarrollo.
Washington, D.C.
Gómez Orea, D., 2002. Ordenación Territorial. Mundi-Prensa. Agrícola española, S.A. Madrid.
Perfetti, J. J. (2013). Políticas para el desarrollo de la agricultura en Colombia. Bogotá: Fedesarrollo.
Valcárcel-Resalt, G. y Troitiño, M.A., 1992. (Eds.). Desarrollo Local y Medio Ambiente en Zonas
Desfavorecidas. MOPT. Colección Monografías. Madrid.