3. El frío hace que las bacterias y hongos
crezcan más despacio o, si es muy intenso,
que detengan su actividad casi por
completo.
Refrigeración: Permite conservar los
alimentos unos días.
Congelación: Por debajo de -10 °C en los
congeladores domésticos, nos permite
conservar los alimentos mucho más tiempo
(nunca indefinidamente)
4. Son sustancias que se añaden a los alimentos para
que estos mantengan sus cualidades.
Los conservantes: Se trata de sustancias que
dificultan o impiden el desarrollo de los
microorganismos.
5. Tratamiento al que se somete un alimento (o
cualquier objeto) y que tiene como resultado la
eliminación de todos los gérmenes. Se trata de
una técnica muy utilizada en la industria láctea.
Uno de los procesos de esterilización de la
leche más empleados es la pasteurización
6. Consiste en el secado de algunos productos como
granos, cereales, frutas y vegetales, exponiéndolos al
calor extremo, con la finalidad de eliminar una gran
cantidad de agua en ellos, evitando el desarrollo de
bacterias y procurando la conservación de las
vitaminas en los productos deshidratados
7. Sistema que permite conservar los
alimentos que hayan sido cocinados o
que se encuentren en su estado
natural.
Consiste en extraer el oxígeno del
recipiente que contiene al producto, de
esta manera se evita la oxidación y
putrefacción del alimento a
conservar, prolongando su fecha de
caducidad en más de 30 días y
hasta 1 año.
8. Se basa en la combustión de plantas de modo que el
humo incida sobre el alimento. El ahumado desempeña
varias funciones: colorido, sabor, conservación y
eliminación de microbios. Se aplica principalmente a los
productos como la carne y el pescado gracias a los
efectos combinados de la deshidratación y el efecto
antiséptico del ahumado.
9. Se basa en presentar un producto
alimenticio a la acción de la sal o por
difusión directamente en la superficie
del alimento (seco) o mediante la
inmersión del producto en una solución
salina.
Este proceso puede bloquear el
crecimiento microbiano. Esta técnica se
utiliza principalmente en el queso, la
carne y la conservación de
determinadas especies de pescado