Este documento compara y contrasta los procesos lineales y los procesos intermitentes. Los procesos lineales se basan en procedimientos estandarizados y fijos para producir un bien o servicio específico de manera eficiente, mientras que los procesos intermitentes no tienen un flujo de producción definido y producen diversos productos según los requerimientos del cliente. Como ejemplos se mencionan la producción de Coca-Cola como proceso lineal y la producción de vino como proceso intermitente.