Conferencia pronunciada en el contexto del Seminario Internacional "Patrimonios urbanos, diagnósticos históricos y futuros del pasado". Organizado por el Instituto Universitario de Urbanística de la Universidad de Valladolid los días 10 y 11 de marzo de 2016.
C-16-1_13. Ávila: una ciudad patrimonio en desaparición - Alfonso Álvarez Mora (IUU-UVa)
1. SEMINARIO INTERNACIONAL
“PATRIMONIOS URBANOS, DIAGNÓSTICOS HISTÓRICOS Y
FUTUROS DEL PASADO”
UNIVERSIDAD DE VALLADOLID, 10 Y 11 DE FEBRERO DE 2016
CONFERENCIA
ÁVILA: UNA CIUDAD PATRIMONIO EN DESAPARICIÓN.
ALFONSO ÁLVAREZ MORA
2. 2010 1986
2002
EXTENSIÓN PERIFÉRICA
Y REESTRUCTURACIÓN DEL
CENTRO HISTÓRICO.
La extensión posibilita la exclusividad
del “centro; la “renovación” de éste
facilita y justica la extensión
Renovación Urbana en el
Centro Histórico de Ávila
1960/2012
ÁVILA
3. RENOVACIÓN, ABANDONOS,
DESOLACIÓN Y RUINAS,
QUE ENCUENTRAN SU RAZÓN
DE SER EN EL PROCESO DE
PRODUCCIÓN INMOBILIARIO
PROTAGONIZADO POR
LA CIUDAD DESDE TIEMPOS
PRETÉRITOS.
Entre 1950 y 2005, la población de
Ávila ha pasado de 22.577 habitantes
A 52.612, unos 33.000 habitantes
más. Estamos hablando de un
crecimiento demográfico de un 133%.
El número de viviendas, entre 1950 y
2001, por su parte ha experimentado
un crecimiento del 926%. De las
2400 viviendas, en 1950, a las
24.921 de 2001, es decir, 22.521
Viviendas para 25.380 nuevos
habitantes
4. PROGRAMACIÓN-PRODUCCIÓN
DE
SUELO RESIDENCIAL
Entre el Plan de 1986 y el de 1998 se han
programado 1200 nuevas hectáreas de suelo,
con una capacidad para albergar unos 120.000
habitantes.
En 1986, Ávila contaba con 44.628 habitantes,
y en 1998 algo más de 47.000. En ese mismo
período, el número de viviendas construidas no
alcanzó las 400 por año. Las viviendas
programadas en el Plan de 1998 ascendían
a 22.800, unos 60000 habitantes
1964
1986
1998
5. Crecimiento cuantitativo-extensivo
que ha supuesto un vaciamiento del
Centro Histórico a favor de la nueva
“periferia suburbial”. En 1980, Ávila
contaba con algo más de 40.000
habitantes, de los que el 12% habitaban
el Centro Histórico.
Éste había perdido, por entonces, el 50%
de su población.
“Recuperar el Centro Histórico” desde presupuestos
implicados con una “política de catalogación”.
Ausencia de una política de “recuperación
residencial”
DE LA EXTENSIÓN
PROGRAMADA EN EL PLAN DE 1998, AL
VACIAMIENTO DEL
RECINTO AMURALLADO
Entre 1998 y 2002, se conceden licencias
para 4600 nuevas viviendas, es decir,
1150 viviendas/año, frente a las
400 viviendas/año de las décadas
anteriores. De dichas viviendas, tan sólo
96 se corresponden con el Recinto
Amurallado, como “obras de
rehabilitación”
6. LA PRODUCCIÓN RESIDENCIAL
1990-2007
Importante actividad inmobiliaria a
partir del año 2002. Se construyen
hasta 4510 viviendas en 2007;
2586 en 2006; 3481 en 2005.
10.577 nuevas viviendas en tres años
En esos mismos años, apenas se
construye el medio centenar de
viviendas en el Recinto Amurallado.
En el resto, hasta los límites del Plan de
Gestión, en torno al medio millar de
nuevas viviendas.
El 95% de las nuevas viviendas se
localizan fuera del ámbito del Plan
de Gestión.
El 4,49% se construyen dentro de
dicho ámbito.
El 0,44% en el Recinto Amurallado
7. MENOS POBLACIÓN Y
MENOS VIVIENDAS
A MEDIDA QUE NOS ACERCAMOS AL
RECINTO
AMURALLADO
Entre 2001 y 2008 la población de
Ávila ha aumentado en 6000
habitantes, mientras las nuevas
viviendas construidas han sido
14.996, de las que el 95% se
localizan fuera de los límites de
Plan de Gestión.
Algo más de 1000 viviendas, en este
último, para un aumento de
población de unos 331 habitantes.
Unas 112 nuevas viviendas, en el
Recinto Amurallado, para un aumento
de población de algo mas de 100
Habitantes.
8. VIVIENDAS CONSTRUIDAS
en el interior de los Conjuntos Históricos y fuera de los mismos, en
relación con la
EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN
en ambos sectores urbanos.
Se constata que se han producido unas
11.090 nuevas viviendas, en las doce
localidades seleccionadas, para un aumento
de población de 1574 habitantes
Una media de 7 viviendas por habitante
El 22.6% de las nuevas viviendas se han
construido dentro de los Conjuntos Históricos.
El 76.4% fuera de los mismos.
UNA VALORACIÓN ACTUALIZADA
A LOS ÚLTIMOS AÑOS.
1993-2009
Evolución de la Población
9. Municipio
Numero 1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población 1.397 1.532 1.408 1.378 2.031 3.678 4.618
Viviendas 199 263 347 577 1.042 1.985
Población 10% 1% -1% 45% 163% 231%
Viviendas 32% 74% 190% 424% 897%
199 64 84 230 465 943
Fuente: INE. Censo de Población y Vivienda de 2001 y Padrón de población de 2005.
Ministerio de Cultura 2006. Registro Nacional de Bienes de Interés Cultural.
Año de Incoación
Evolución del número de población y viviendas por décadas censales
de los municipios declarados como conjuntos históricos
Evolución: porcentaje acumulado desde 1950
Simancas
1981
Viviendas construidas por periodos según el Censo de 2001
Evolución del número de población y viviendas
Tipología de las viviendas construidas en el periodo intercensal
4.618
3.678
2.031
1.3781.4081.5321.397
199 263 347
577
1.042
1.985
1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población
Viviendas
60%
21%
18%
58%
19%
23%
56%
25%
19%
43%
37%
20%
67%
16%
17%
64%
17%
19%
61%
20%
19%
0%
20%
40%
60%
80%
100%
< 1950 1950/ 60 1960/ 70 1970/ 81 1981/ 91 1991/2001 Total
Vacías
Secundarias
Principales
SIMANCAS
Entre 1950 y 2005, la población ha aumentado en un 321%, mientras el
número de nuevas viviendas lo ha hecho en un 897%.
En los últimos años, entre 1993/96 y 2007, en el Conjunto Histórico se
han construido 524 nuevas viviendas, para un aumento de población de
297 habitantes. Fuera del Conjunto Histórico, la construcción de nuevas
viviendas se ha elevado a 1286, mientras la población ha aumentado en
730 habitantes.
En total, 1810 nuevas viviendas para 1017 habitantes,
1.7 viv/habitante
ALGUNOS CASOS CONCRETOS
NÚCLEO DINÁMICO
10. Municipio
Numero 1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población 1.550 1.419 1.321 1.434 1.650 1.733 2.125
Viviendas 979 1.104 1.358 1.599 1.846 2.278
Población -8% -15% -7% 6% 12% 37%
Viviendas 13% 39% 63% 89% 133%
979 125 254 241 247 432
Fuente: INE. Censo de Población y Vivienda de 2001 y Padrón de población de 2005.
Ministerio de Cultura 2006. Registro Nacional de Bienes de Interés Cultural.
Viviendas construidas por periodos según el Censo de 2001
Evolución del número de población y viviendas
Tipología de las viviendas construidas en el periodo intercensal
Año de Incoación
Evolución del número de población y viviendas por décadas censales
de los municipios declarados como conjuntos históricos
Evolución: porcentaje acumulado desde 1950
Riaza
1970
1.550
1.419
1.321 1.434
1.650
1.733
2.125
2.278
1.846
1.599
1.358
1.104
979
1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población
Viviendas
21%
34%
45%
26%
55%
19%
37%
57%
6%
35%
44%
20%
47%
38%
15%
34%
41%
25%
30%
40%
30%
0%
20%
40%
60%
80%
100%
< 1950 1950/ 60 1960/ 70 1970/ 81 1981/ 91 1991/2001 Total
Vacías
Secundarias
Principales
RIAZA
Entre 1950 y 2005, la población ha aumentado en un 37%,
mientras el número de viviendas lo ha hecho en un 133%.
Entre 1996 y 2008, la población ha aumentado en unos 800
habitantes, mientras las viviendas lo han hecho en casi
2000, 184 se han construido en el interior del Conjunto
Histórico, y 1665 fuera de mismo. 2.5 viv/habitante
NÚCLEO CON DINÁMICA INVERTIDA
Aumentan ambas variables, aunque con más contundencia el
número de viviendas.
11. Municipio
Numero 1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población 9.916 10.101 11.794 14.040 13.802 12.381 12.275
Viviendas 1.054 1.829 2.996 4.215 5.130 6.387
Población 2% 19% 42% 39% 25% 24%
Viviendas 74% 184% 300% 387% 506%
1.054 775 1.167 1.219 915 1.257
Fuente: INE. Censo de Población y Vivienda de 2001 y Padrón de población de 2005.
Ministerio de Cultura 2006. Registro Nacional de Bienes de Interés Cultural.
Viviendas construidas por periodos según el Censo de 2001
Evolución del número de población y viviendas
Tipología de las viviendas construidas en el periodo intercensal
Año de Incoación
Evolución del número de población y viviendas por décadas censales
de los municipios declarados como conjuntos históricos
Evolución: porcentaje acumulado desde 1950
Astorga
1978
9.916 10.101
11.794
14.040 13.802
12.381 12.275
6.387
5.130
4.215
2.996
1.829
1.054
1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población
Viviendas
51%
20%
28%
61%
18%
21%
71%
14%
15%
71%
15%
15%
73%
16%
11%
64%
16%
20%
66%
16%
18%
0%
20%
40%
60%
80%
100%
< 1950 1950/ 60 1960/ 70 1970/ 81 1981/ 91 1991/2001 Total
Vacías
Secundarias
Principales
NÚCLEO CON TENDENCIA A LA RECESIÓN
ASTORGA
Entre 1950 y 2005, la población ha aumentado en un 24%, mientras
Las nuevas viviendas construidas lo han hecho en un 506%.
Entre 1996 y 2008, se construyen, en el interior del Centro Histórico,
337 nuevas viviendas para 409 habitantes menos, mientras fuera del
mismo, donde apenas varia la población, realmente 2 habitantes
menos, se construyen 1517 nuevas viviendas.
1854 nuevas viviendas para 411 habitantes
menos.
12. Municipio
Numero 1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población 5.034 4.816 6.124 4.677 4.136 3.739 3.710
Viviendas 886 1.106 1.429 1.657 1.857 2.062
Población -4% 22% -7% -18% -26% -26%
Viviendas 25% 61% 87% 110% 133%
886 220 323 228 200 205
Fuente: INE. Censo de Población y Vivienda de 2001 y Padrón de población de 2005.
Ministerio de Cultura 2006. Registro Nacional de Bienes de Interés Cultural.
Viviendas construidas por periodos según el Censo de 2001
Evolución del número de población y viviendas
Tipología de las viviendas construidas en el periodo intercensal
Año de Incoación
Evolución del número de población y viviendas por décadas censales
de los municipios declarados como conjuntos históricos
Evolución: porcentaje acumulado desde 1950
Villafranca del Bierzo
1965
5.034 4.816
6.124
4.677
4.136
3.739 3.710
2.0621.8571.6571.429
1.106886
1950 1960 1970 1981 1991 2001 2005
Población
Viviendas
65%
13%
22%
70%
11%
19%
78%
8%
14%
75%
11%
13%
75%
12%
13%
67%
9%
24%
70%
11%
19%
0%
20%
40%
60%
80%
100%
< 1950 1950/ 60 1960/ 70 1970/ 81 1981/ 91 1991/2001 Total
Vacías
Secundarias
Principales
NÚCLEO EN RECESIÓN
VILLAFRANCA DEL BIERZO.
Entre 1950 y 2005, la población disminuye en un 26%, mientras el número de
viviendas aumenta en un 133%.
Entre 2000 y 2008, la población disminuye en 416 habitantes, 113 en el núcleo
urbano y en 303 fuera del mismo.
Entre 1994 y 2009, se construyen 480 nuevas viviendas, 390 en el Conjunto
Histórico y 90 fuera del mismo.
480 nuevas viviendas para 416 habitantes menos.
13. Color Rojo: Demoliciones-sustituciones. Color Verde: Edificios abandonados o en ruinas.
Cercado Rojo: ¿Edificios rehabilitados?. Cercado verde: Solares.
Color Azul: Edificios tradicionales fuera del Recinto Amurallado.
RESULTADOS TRABAJO DE CAMPO
JUNIO-JULIO 2009
14. DOS MANERAS DE PROCEDER A LA
RECONSTRUCCIÓN DEL CONJUNTO HISTÓRICO.
1. De una gran intensidad, semejantes a “operaciones
periféricas”, en la mitad Oeste del Recinto Amurallado
2. La que apuesta por una hipotética “calidad”, que se
realiza, sobre todo, en la mitad Este hasta el Grande
15. EL ESPECTÁCULO DE LOS EDIFICIOS VACÍOS,
EN RUINA, ABANDONADOS
Y DE LOS SOLARES.
16. LA CATALOGACIÓN COMO TÉCNICA QUE IMPULSA EL DETERIORO, EL ABANDONO,
LA RUINA Y LA DESOLACIÓN
De hecho, si comparamos el plano donde figuran los edificios catalogados con el que muestra el
trabajo de campo que hemos realizado, coinciden ruinas, abandonos, incluso solares, con algunas
muestras edificatorias catolagadas
17. Solares, abandonos y ruinas, en Calle Conde D. Ramón y Ramón y Cajal, correspondientes
con edificios que figuran en el
Catálogo
18. Proliferación de
Viviendas vacías, o
edificios abandonados,
en cualquier parte del
Recinto Amurallado.
Se contabilizan 8.192
viviendas vacías en
2001,
el 32,4% del total.
En 2003, dicho
porcentaje
alcanzaba el 40%
CONSECUENCIAS PARA EL CONJUNTO HISTÓRICO
19. Se impulsa un proceso que está suponiendo potenciar una intensa producción residencial en
terrenos periféricos, reorganizándose el “espacio de la reproducción” en estrecha vinculación
con los grandes “centros comerciales”, también periféricos, mientras el Centro Histórico,
asumiendo un nuevo papel en esta reorganización socio-espacial, se prepara para recibir
una población selectiva, una actividad excluyente y unas formas, en hábitat y “componentes
públicos”, que van a ir procurando su carácter como “espacio selectivo” y su
marginación de clase
20. HIPÓTESIS VERIFICADAS
1.
La reducción del Conjunto Histórico a sólo un “bien patrimonial”.
El comportamiento de los Centros Históricos no se expresa, siempre, del mismo modo, en
ningún caso de manera universal, no manifestándose, por tanto, de igual manera, en todo
tiempo y lugar. Por el contrario, cada caso merece una interpretación diferente, como
diferentes son los condicionantes urbanístico-territoriales que los asisten.
Si a estos ámbitos urbanos se los ha caracterizado como realidades a las que sólo les cabe una
única interpretación, aquella que se deriva de su condición como “bienes patrimoniales”, ha
sido porque el conocimiento al que se han visto sometidos no sobrepasaba dichas limitaciones
disciplinares. Los Centros Históricos, en este sentido, se han contemplado al margen de
caracterizaciones urbanísticas, más como objetos a contemplar que como “espacios sociales”,
más como espacios a someter a una posesión de clase a los que se les ha negado
su participación en la resolución de los problemas y contradicciones que afectan a la ciudad
en su conjunto. De ahí, el olvido consciente del que han sido objeto en su calidad de “espacios
centrales” colectivos, y cuando dicha “centralidad” se ha tenido en cuenta lo ha sido para ser
sometida a un proceso de desposesión, impidiendo su heterogeneidad social, haciendo de los
mismos el escaparate desde el que reivindicar una posición de clase.
21. La aniquilación previa de los
“servicios urbanos básicos”,
como
Estrategia de desposesión.
Ejemplo de Centros Educativos que han sido
sustituidos por edificios hoteleros de lujo.
22. 2
Diversidad de comportamientos-diversidad de territorios.
Esa diversidad de comportamientos espaciales que recorre el campo de los Centros Históricos
es consecuencia, a su vez, de la variedad de territorios en los que se integran y a los que deben
su razón de ser. Su caracterización, en suma, es producto de las determinaciones que les
imponen los ámbitos territoriales que los soportan. No cabe un entendimiento racional de
dichos ámbitos urbanos sin recurrir a la comprensión de las dinámicas territoriales en las que
se encuentran inmersos.
La “centralidad” que detentan, en este sentido, es una categoría espacial de índole territorial.
Si la ciudad goza de un atributo semejante, si determinados ámbitos espaciales de la misma se
alzan como lugares de referencia a los que remitirse para poder ejercer prácticas colectivas
concretas, es debido, quizá, al papel preponderante que dicha ciudad representa en un marco
territorial concreto. Desposeídas de estas condiciones, a las ciudades sólo les queda acogerse a
procesos de posesión que reivindican rodearse de ambientes históricos en decadencia,
reinvirtiendo sus contenidos ancestrales hacia los requerimientos colonialistas de concretos
grupos sociales allí reunidos.
23. 3
Intensidad de los procesos inmobiliarios como denominador común
Si cada Centro Urbano-Histórico se comporta de diferente manera, acorde con los
determinantes que dimanan de sus connotaciones territoriales, lo que sí es común a todos
ellos, dicho esto como regla general que admite excepciones concretas, es la intensidad de los
procesos de promoción inmobiliarios que recorren tanto el territorio de la ciudad como el
específico de su Centro Histórico. Dicha intensidad, en la manera de proceder, sobre todo, a la
producción de nuevas viviendas, se ha constituido como un fenómeno que ha golpeado con
mayor virulencia en el territorio español. Un hecho semejante, estaba provocando que se
construyesen muchas más viviendas para una población que, en muchos casos, no hacía más
que disminuir, haciendo aparecer, con ello, el fantasma de las vivienda vacías que, para el caso
de España, se cifra, en la actualidad, en torno a los tres millones. Viviendas vacías que se
manifiestan tanto en la no ocupación de las nuevas como en el desalojo de las antiguas.
Para el caso de España, en efecto, hemos deducido que, sólo por lo que se refiere a los núcleos
urbanos que contienen un Conjunto Histórico, se ha construido una vivienda por habitante,
cuando lo normal es que sean 2,7 habitantes, como media, los que las ocupan.
24. 4
El espacio del Conjunto Histórico como “reserva de clase”
Esta intensidad en el proceso de producción inmobiliaria no ha afectado, por igual, a los
Centros Históricos que al resto de la ciudad en la que se integran. Del porcentaje reseñado de una
vivienda por habitante que, de media, caracteriza dicho proceso, para el caso español, corresponde 0,2
viviendas por habitante, como media aplicable, al ámbito de los Centros Históricos. Esto quiere decir que
en estos se reduce, drásticamente, el porcentaje de nuevas viviendas con respecto a aquel otro que se
vincula con el resto de la ciudad.
En los Centros Históricos no dejan de producirse viviendas, ya sean de nueva construcción o rehabilitadas,
pero en mucha menos cantidad. Se recompensa, en cierto modo, dicha bajada de producción con una
mayor calidad del producto final ofertado. El espacio del Centro Históricos está comportándose, en este
sentido, como “reserva de clase”, mostrando la otra cara de la promoción inmobiliaria, la que ahonda sus
raíces en lo más selecto. La “rehabilitación” se entiende, en este sentido, como el complemento de lujo
del proceso de producción inmobiliario que recorre toda la ciudad. Ambas prácticas, la extensiva-
cuantitativa y la que apuesta por la producción de cierta “cualidad”, constituyen las dos caras de un
mismo proceso: Aquel que apuesta por la producción de la ciudad sin atender más que a los beneficios
económicos que ello aporta, obviando todo lo que tenga que ver con la construcción del espacio social
que garantice su comportamiento como un bien colectivo.
25. 5
La recesión económica no impide la irrupción inmobiliaria.
Esta intensa actividad inmobiliaria, común al comportamiento que expresan los núcleos urbanos que
estamos analizando, se manifiesta de manera similar en todos ellos, aunque parezca que estamos ante
situaciones contrapuestas. La promoción inmobiliaria no se detiene ante situaciones de clara “recesión
económica-social”, como es el caso de Castilla, menos aún en aquellas otras en las que se se desarrolla un
turismo de temporada, cuando el uso que se hace de la ciudad correspondiente apenas sobrepasa los dos
meses al año. En ambas situaciones, se emprende, por parte del sector inmobiliario, una oferta de
territorios desechados, buscando la posibilidad de su reutilización, una vez que se ha producido su
vaciado real, su “desposesión de clase”, ya sea por expulsión real, o por el uso temporal-veraniego que se
hace de los mismos. En el primer caso, los Centros Históricas recrean un vacío, prácticamente, irreversible,
ya que su hipotética dinámica depende, en una mínima parte, del uso esporádico que se haga de los
mismos por parte de aquellos grupos sociales, nuevos colonizadores, quienes deciden, cuando lo creen
oportuno, abrir sus nuevas posesiones para su uso recreativo personal; en el segundo, se asegura, siempre
como hipótesis, el uso temporal que se hace del “centro veraniego”, aunque a costa de aumentar los
riesgos de su supervivencia.
Dos maneras de entender, a su vez, el ejercicio de la “centralidad”: La que le cabe asumir a ciertos núcleos
urbanos que han visto como sus valores patrimoniales han sido objeto de procesos concretos de
desposesión, o aquella otra que los convierte en asiento, temporal o esporádico, de aquellos que los
recrean como expresión de clase.
Políticas urbanas aplicadas a los Conjuntos Históricos: Logros y fracasos.
Hacia una propuesta de rehabilitación urbana como alternativa al modelo inmobiliario extensivo
RESEÑAS DE LOS CONJUNTOS HISTÓRICOS SELECCIONADOS PARA ESTUDIO.
E X T R E M A D U R A
Página 34
DELIMITACIÓN DEL CONJUNTO HISTÓRICO
ROJO: CASTILLO.
AMARILLO: CENTRO HISTÓRICO (VILLA).
26. 6
Pérdida constante de efectivos demográficos.
Con respecto a la población se puede decir, en general, que disminuye, o se mantiene, en el
ámbito específico de los Centros Histórico, mientras en el resto del territorio urbano se aprecia un
aumento constante de la misma. Dicho esto en términos generales, ante los que cabe, naturalmente, las
excepciones de turno independientemente de esta apreciación general. Lo que hemos constatado es la
relación estrecha que se mantiene entre las características económico-sociales que distinguen al territorio
donde se localizan los núcleos que contienen un Conjunto Histórico y el comportamiento demográfico que
los asiste.
En zonas en clara recesión económica-social, como es el caso de Castilla, observamos una pérdida de sus
efectivos demográficos, sobre todo en los Conjuntos Históricos, o un estancamiento de la misma. Dicha
pérdida de población también se evidencia en aquellos otros ámbitos geográficos que dan muestras de
algún tipo de dinamismo económico, aunque no muy destacado, que se manifiesta, preponderantemente,
en el sector turístico
En regiones como Cataluña, valga como ejemplo, tanto la población de los Centros Históricos como de las
ciudades, en su conjunto, dan muestras de un dinamismo creciente. Sólo en las grandes ciudades, sobre
todo capitales de provincia, la población de los Centros Históricos da síntomas de debilidad.