1. EL ESTUDIANTE NO ESTÁ SÓLO
La mayor parte del tiempo nuestro estudiante está solo y
debe planificar su tiempo y esfuerzo para poder cumplir
con las distintas actividades que se le plantean durante el
curso. Pero también es cierto que, cada vez más, tiene que
compartir sus opiniones, inquietudes, dudas y crear
conocimiento junto al resto de la comunidad del curso.
2. Los métodos pedagógicos basados en la transmisión de
información resultan insuficientes y muy limitados. La
utilización de herramientas que permitan la
comunicación, la colaboración y la producción del
conocimiento son fundamentales para mejorar los
procesos formativos.
3. La situación de aprendizaje consiste en la tarea o
conjunto de tareas a realizar por los estudiantes que
han de permitir alcanzar la construcción colaborativa
de conocimiento.
4. Podemos pensar en múltiples tipos de actividades
diseñadas para ser trabajadas en grupo en función de
los contenidos propios de la materia y los materiales de
aprendizaje disponibles, pero también hay que tener
presente que, en cada caso, hay que diseñar aspectos
relacionados con el proceso de gestión y organización
de la actividad docente.