1. PEÑA BORRERO, Luis ¨la competencia oral y escrita
en la educación superior¨. Iniciativa del Ministerio de
Educación Nacional. Bogotá. Diciembre 26 de 2008; p, 1-9.
El autor Luis peña Borrero, docente de la facultad de psicología de la Pontificia universidad
javeriana realza la importancia del lenguaje oral y escrito para el desarrollo del aprendizaje
de los estudiantes en la educación superior y como las instituciones deben vincular a sus
programas estrategias incentiven a los estudiantes a que lean y escriban mejor.
Luis Peña Borrero plantea en su texto la importancia de tomar con bastante cuidado la
competencia oral y escrita en la educación superior, es necesario que se tome conciencia
sobre este aspecto que influye a todos y que resulta ser una bomba de tiempo esperando
estallar en la cara de una generación que se ha formado en el flujo incesante de información
venida de ordenadores. Es necesario analizar en su pasado los métodos de lenguaje que se
han implementado durante la historia para así renovar estos, de acuerdo con los procesos y
avances tecnológicos de hoy.
El tema acerca de las insuficientes competencias con las que algunos estudiantes, por no
decir la mayoría, entran a la educación superior es problemático hoy en día, muchas
investigaciones se hacen al respecto, pero ¿estas llegan a tener transcendencia en las
instituciones educativas? Tal y como lo plantea el autor Luis Peña Borrero es necesario que
se tome consciencia acerca del mal aprovechamiento de las herramientas del lenguaje en las
instituciones. La academia es un lugar donde los individuos se forman intelectual y social
mente, aquí se pone en práctica lo que el estudiante aprendió durante su estadía en el
colegio, pero, como ya hemos visto las instituciones al parecer les ha tocado formar a estos
estudiantes en herramientas lingüísticas como si nunca hubiesen pasado por una primaria ni
un bachillerato. ¿A quién culpar? Este mal que ha invadido a esta generación se ha metido
dentro y es difícil erradicar, se tiene que pensar que aquellas metodologías practicadas por
profesores hace tiempo atrás no pueden satisfacer ahora las necesidades de un estudiante
que creció rodeado de artefactos tecnológicos que le proporcionaban información a una
velocidad que su propio cerebro no puede analizar. Desde la metodología hasta las mismas
reglas establecidas para la escritura y la oralidad deben ser reevaluadas para así, si es que se
puede llegar al epicentro de una enfermedad que no parara en invadir a los jóvenes futuro
del país hasta que se encuentre la manera de comprometer e incentivar a unos individuos
que olvidan respirar por hacer click en sus aparatos electrónicos.
2. Podemos concluir la importancia que tiene el lenguaje oral y escrito en la educación
superior, en las instituciones universitarias donde los individuos se formaran para darle la
cara a un futuro brillante, pero ¿qué pasa con el proceso de las instituciones superiores
cuando es pausado por las herramientas no aprendidas por el estudiante durante su estadía
en el colegio? Para que este proceso de formación no sea pausado y sea mediocre es
necesario reevaluar los métodos con los cuales se le enseña al estudiante a escribir, leer y
comunicarse, es necesario ya que hoy no es ayer, ya que la comunicación y el contacto con
textos se hace mediante una pantalla y esta generación no puede salvarse del naufragio con
los mismos flotadores del pasado.