Este documento discute el problema del abandono escolar en las zonas rurales de México. Señala que existen muchos factores que pueden influir en la deserción escolar de los estudiantes de secundaria en estas áreas, como bajos ingresos económicos, falta de estímulo hacia la educación, y escuelas rurales con pocos recursos. Además, la calidad de la educación en las escuelas rurales depende en gran medida de los docentes, pero estos a menudo carecen de capacitación adecuada y motivación para
Factores que influyen en el abandono escolar en zonas rurales
1. Abandono escolar desde temprana edad hasta
llegar a medio superior
El interés por abordar este tema es indagar con profundidad esta
problemática con el propósito de mostrar los elementos más relevantes
de esta. Por consiguiente la realización de esta investigación posee
diversos motivos que la justifican, entre los cuales, que es un problema
educativo que afecta al desarrollo de la sociedad en gran manera.
De acuerdo a lo establecido es una necesidad investigar las perspectivas
de los estudiantes del nivel secundario, ya que existen muchos factores
a los que los jóvenes de estas instituciones educativas están expuestos,
que pueden ser determinantes de su vida futura, dentro de lo que se
pueden señalar: su bajo ingreso económico, poco estímulo hacia la
educación, falta de motivación y autoestima, desviaciones culturales,
bajas expectativas de los maestros frente a los estudiantes, entre otros.
Las condiciones de las escuelas rurales no están en la capacidad de
asegurar el desarrollo de las competencias más elementales en los
alumnos como la lectura y la escritura o las operaciones simples
de cálculo mental, a pesar de que, hoy por hoy. La enseñanza frontal, el
copiado y las actividades memorísticas han dejado paso a estilos de
enseñanza horizontal en el que los alumnos son el centro del trabajo
educativo con metodologías activas y grupales.
Ello revela que los docentes tienen asimilado un repertorio
de estrategias metodológicas que, mal o bien manejan y aplican. Esta
afirmación, empero, no podría aplicarse en el dominio científico que
poseen los docentes acerca de los contenidos curriculares.
Es harto conocida la debilidad que muestran en su preparación y el poco
interés y motivación que tienen por mejorarla.
Esto indica que mientras más alejadas estén una población y
su escuela de la capital distrital o provincial, o de los centros urbanos en
general, el grado en que la escuela depende de su docente es mayor. Este
hecho es aún más innegable, cuando se toma en consideración que la
2. gran mayoría de niños y niñas que viven en zonas rurales, su relación
con la escuela y la educación formal está restringida a lo que se ofrece en
su propia localidad. Es la única oportunidad que tienen para educarse y
lograr una mejor calidad de vida.
Negársela es un atentado a sus derechos como persona.
Lamentablemente, por la falta de control y supervisión de los
organismos responsables la jornada escolar diaria se reduce a unas pocas
horas, los horarios no se cumplen; la semana escolar es de tres o cuatro
días por los desplazamientos que realiza el docente rural de su centro
trabajo a su domicilio, que por lo general se encuentra en la zona urbana.
Ello contribuye a depreciar el servicio educativo que se brinda en la
escuela rural.
En ese sentido, una capacitación que sensibilice al docente de
la responsabilidad social que debe impregnar cada una de
sus acciones en bien del desarrollo personal de sus alumnos y de
la comunidad resulta imprescindible.
Las causas por las que se abandona la institución educativa pueden ser
diversas. Tradicionalmente los chicos pertenecientes a las clases
socioeconómicas más humildes de la sociedad han tenido dificultades
con el rendimiento escolar y han registrado índices de fracasos mucho
mayor que de los niños que no son víctimas del flagelo de la pobreza.
Roberto Carlos Ledezma Estrada