2. Los principios de la transformación curricular en la
Facultad de Ciencias Exactas y Naturales son las
ideas rectoras para el diseño, desarrollo,
implementación, aplicación, interpretación,
evaluación e innovación en el proceso de cambio
curricular. Los principios dentro del “deber-ser” se
entienden como potencialidades, como metas a
alcanzar, es decir un “llegar-a-ser” consecuente-
coherente y no como disposición absoluta o punto
de partida.
En primer lugar, se presentan los principios de la
transformación curricular y en una segunda parte,
las cualidades del profesor
3. Principios de la
transformación curricular
1. Integralidad: El currículo debe cimentar una educación que propicie en los
docentes y estudiantes de la Facultad el desarrollo de todas sus potencialidades,
es decir, la expresión y crecimiento de sus dimensiones científicas, humanísticas,
filosóficas, éticas, estéticas, políticas y sociales en concordancia con los
principios éticos y la función social de la Universidad.
2. Flexibilidad: La flexibilidad en el currículo no solamente debe ser
entendida como la posibilidad de especialización disciplinar, sino como
flexibilidad académica, pedagógica, administrativa y normativa. El currículo
debe permitir al estudiante una transición gradual y creciente desde el núcleo
básico de formación, hasta donde el desarrollo de sus potencialidades lo
determinen; por ejemplo, énfasis en la investigación hasta estudios de posgrado,
énfasis en la docencia universitaria, media y básica, énfasis en la innovación y
aplicación tecnológica en la industria y/o énfasis en la apropiación de tradiciones
culturales como el arte, la literatura, la historia y la filosofía.
3. Interdisciplinariedad: El currículo debe fomentar el diálogo entre saberes y
propiciar el reconocimiento del otro como interlocutor válido, condiciones
necesarias para la consolidación de la comunidad académica. Desde la
multiplicidad de lenguajes el currículo debe propiciar la construcción de nuevos
referentes y significados para el acercamiento y la comprensión, de y entre los
diferentes saberes.
4. Investigación y Docencia: Para enseñar una disciplina
científica es necesario conocerla, es decir comprender su
estructura conceptual, sus métodos y sus lenguajes y los
procesos de construcción del conocimiento e investigación que la
caracterizan. En la Facultad, la Investigación además de
posibilitar la recreación y/o generación del conocimiento es el
fundamento de la Docencia. En este sentidono existe disyunción
entre Docencia e Investigación, en la medida en que “solo es
enseñable una disciplina científica por alguien que la haya
comprendido y aprendido mediante la investigación” (Villaroel,
1998). Por tanto, docencia e investigación son una unidad
complementaria como parte esencial del currículo.
Extensión: En la extensión se materializa y expresa la función
social del currículo, por lo tanto éste regula y equilibra la
universalidad de los discursos de los diferentes saberes y los
concreta en la “trans-formación” del entorno social ya sea
regional, nacional o internacional.
5. 6. Estructura lógica y conceptual de la disciplina: En el currículo los
saberes y/o conocimientos deben estar sistematizados en una red
jerárquica de relaciones entre conceptos, nociones, modelos, teorías y
leyes organizadas de acuerdo con el estado del arte de cada una de las
disciplinas. Es la estructura y el conocimiento lógico de la disciplina lo
que va a permitir establecer un mapa simbólico global, que permita la
coherencia de las relaciones tanto internas, entre áreas, como externas,
entre saberes. Esta estructura debe permitir el tránsito entre los
conocimientos ya establecidos y los de frontera, y entre la creación y la
recreación del conocimiento científico.
7. Apropiación del conocimiento: La estructura del modelo curricular
debe propiciar, en los docentes y estudiantes, el aprendizaje
significativo y la apropiación del conocimiento mediante la revisión
permanente del avance científico en cada una de las disciplinas, la
incorporación de prácticas docentes acordes con los procesos de
construcción del episteme, el conocimiento e investigación científica, y
que adopten modelos didáctico pedagógicos apropiados para el nivel
cognitivo específico en que se encuentran los individuos que aprenden.
6. Apropiación del lenguaje: El modelo curricular debe establecer
e implementar los mecanismos que propicien el desarrollo de la
comunicación oral y escrita en y entre docentes y estudiantes, y
que permita asimilar de modo significativo tanto el lenguaje
común, como el lenguaje propio de la disciplina. Además,
propiciar el desarrollo de habilidades de representación, de
búsqueda, de clasificación, de selección, de contrastación y de
valoración crítica de la información.
Acción Crítica: El currículo debe incentivar en los docentes y
estudiantes una actitud de pensamiento crítico, reflexivo y
tolerant que genere una acción consecuente y responsable
enmarcada dentro de sus derechos y deberes propios de una
democracia, de forma tal que con su comportamiento en las
comunidades académicas y en sociedad, sea claro su papel de
mediador y transformador de su entorno.
7. Incertidumbre: Los conocimientos científico no
se deben asumir como definitivos e
inalterables. La ciencia se mueve en la
incertidumbre con hipótesis provisionales y
temporales, que se modifican constantemente
de acuerdo con los avances propios de cada
disciplina. Esto propicia una relación con el saber
cotidiano como fuente de problemas por
resolver desde el conocimiento científico, lo cual
puede aprovecharse desde el ejercicio docente.