La adherencia al tratamiento es un proceso dinámico que depende de factores como el tiempo, la evolución de la enfermedad y la situación del paciente. Existen métodos directos e indirectos para medir la adherencia, siendo los indirectos menos fiables pero más sencillos. Las enfermedades crónicas, que duran más de 6 meses, requieren adherencia constante, pero factores como los efectos secundarios y el coste pueden afectarla. Para mejorar la adherencia, es importante la relación médico-paciente y proporcionar información y