El documento resume las prácticas habituales en el tratamiento del desprendimiento de retina en un hospital. Generalmente se recomienda la retinopexia neumática como primer tratamiento, pero también se usan cirugías esclerales y vitrectomías. La mayoría de los pacientes se curan con un solo procedimiento, aunque algunos requieren múltiples intervenciones. El objetivo es lograr una mácula aplicada y visión útil. Se detallan las indicaciones y ventajas e inconvenientes de cada técnica.