La prueba escrita es un instrumento de medición que permite que los estudiantes demuestren sus conocimientos y habilidades adquiridas de forma escrita. Para que una prueba sea válida, debe medir lo que pretende medir de acuerdo con los objetivos planteados. Una prueba debe seguir un formato que incluya aspectos administrativos e instrucciones, así como ítems objetivos y subjetivos relacionados con los contenidos evaluados.