2. LA PERDIDA DEL MONOPOLIO CULTURAL
DE LA CIVILIZACIÓN OCCIDENTAL
En su proceso de desenmascaramiento de la
razón, así como en su obsesión epistemológica
por las fracturas y los fragmentos
socioculturales, la posmodernidad tomo
conciencia de asistir a un desarrollo de perdida
de la soberanía y del monopolio cultural
occidentales en favor del reconocimiento de
una pluralidad lingüística y de una
multiplicidad cultural que se resistía a ser
considerada en términos de vasallaje y que
reclamaba la igualdad.
3. En el catalogo de la Biennial Whitney de 1993 13 , H. K. Bhabha situó e1
debate de los nuevos valores surgidos mas allá de los conceptos de nación,
raza y sexo en la emergencia de espacios dialógicos de superposición y de
desplazamientos en el dominio de la diferencia en los que e1 «uno» (el
blanco hegemónico occidental) se encuentra y acaba confundiéndose con
el «otro»·(el minoritario supeditado): «El acto de intercambio entre
culturas -escribe H. K. Bhabha- se hace efectivo a través de la
exacerbación de lo que culturalmente es inconmensurable o extraño, lo
cual permite, -entonces, una comprensión del otro, así como una misteriosa
alienaci6n de nuestra .propia prioridad cultural»
4. Primeros intentos: Magiciens de la Terre propuso un
encuentro no jerarquizado de obras de artistas
contemporáneos occidentales (europeos y
norteamericanos) y de artistas de áreas marginales (Haití,
India, Madagascar, Panamá, Zaire, Brasil, Japón, etc.)
desconocidos en los circuitos habituales del arte
contemporáneo. Las obras de los cien artistas presentes en
la macro muestra parisina (cincuenta artistas por cada
uno de los ámbitos mencionados)
5. EL DISCURSO DEL
COLONIZADOR
Por ejemplo: El trabajo de pintores y
escultores no occidentales emigrados
a las metrópolis de occidente que
todavía mantenían vínculos con sus
identidades y tradiciones culturales de
origen (africanas, asiáticas y
sudamericanas
principalmente)
6. Otro ejemplo: La oposición entre lo civilizado y
lo primitivo fue cuestionada de nuevo, sobre
todo desde un punto de vista de confrontación
estética, en la exposición Cocido y crudo, que
Dan Cameron presento en Madrid en 1994. El
critico neoyorquino secciono a cincuenta y
cuatro artistas de veinte países para evidenciar
la posibilidad de encontrar un lenguaje común -
entiéndase un lenguaje obediente a los cánones
occidentales que desafiase las diferencias entre
las sociedades primitivas y las sofisticadas- a los
creadores de cualquier ámbito cultural.
EL DISCURSO DEL
COLONIZADOR
7. Frente a este discurso de la metrópolis; de una cierta
implosión del primer mundo en el tercero (y no del
tercero en el primero como en ocasiones se plantea), se ha
generado una cierta resistencia e incluso afianzamiento de
lo marginal a través de formulas apropiadas del sistema
del arte occidental. A diferencia de exposiciones como
Magiciens de la Terre y Cocido y crudo concebidas desde
el punto de vista del colonizador, esas bienales y otros
proyectos de descolonización intentan vertebrar y
articular una cultura de la diferencia no occidental, como
puede ser la del arte africano, una cultura de
descentramientos y desfiguraciones no excluyentes, sino
incluyentes que tiende, a diluir las fronteras en
experiencias intersubjetivas y colectivas
EL DISCURSO
DESCOLONIZADOR
8. EL DISCURSO DE LAS
MINORÍAS
Una de las primeras exposiciones que
intento documentar y analizar las rutas y
complejidades del desarrollo del arte y la
cultura chicanas, en la que coexisten dos
historias, dos lenguas, dos cosmogonías,
dos tradiciones artísticas y dos sistemas
políticos diversos, a través de la
confrontación con el arte norteamericano
(racional e individualista) y el mexicano
(sincrético, sentimental y ruidoso).
9. El latinoamericano ha tenido siempre que preguntarse
quien es, simplemente porque le resulta difícil saberlo. El
latinoamericano sufre a menudo un complejo en la
encrucijada que lo conduce a afirmarse mediante relatos
ontologizadores. 0 proclama que es tan europeo, indio o
africano como cualquiera -o aún mas-, o se acompleja por
no serlo del todo. Cree pertenecer a una nueva raza de
vocación universalista o se siente victima de un caos y
escindido entre mundos paralelos. Su complejidad lo
confunde o lo embriaga. Además, América Latina ha sido
el espacio de todas las esperanzas y de todos los fracasos.
Gerardo Mosquera.
EL DISCURSO DE LAS
PERIFERIAS
10. Cartographies analiza lo siguiente: no aludir, pues, a
mapas físicos, sino a mapas virtuales en los que se
potencia la idea de viaje, un viaje de ida y vuelta de
hombres de diferentes lugares que desdibujan los
círculos del poder del centro. Esos viajes conforman
artistas y comisarios transnacionales, ciudadanos que
no renuncian a la universalidad, una universalidad
contextualizada y no definida ni deformada por
occidente. Es imposible ver el mundo desde e1
centro, tan solo es posible verlo atravesándolo en
todas direcciones.
EL DISCURSO DE LAS
PERIFERIAS