El documento discute la necesidad de preparar a los estudiantes para el futuro a través del uso de tecnologías de la información y la comunicación en la educación. Señala que debido a los continuos cambios en la sociedad, el sistema educativo debe ayudar a los estudiantes a desarrollar las habilidades necesarias para adaptarse a los nuevos tiempos. También argumenta que los maestros deben comprometerse con la innovación tecnológica para facilitar el aprendizaje y desarrollo integral de los estudiantes, quienes son el futuro

1. UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS
(UAPA)
ASIGNATURA:
Tecnologías de la información y la comunicación aplicadas a la educación
ENSAYO SOBRE:
Formación de los alumnos para el futuro
FACILITADORA:
Máxima Altagracia Rodríguez
PARTICIPANTE:
Claribel Quezada Coronado
MATRICULA:
17-3132
ENERO 2017
SANTIAGO DE LOS CABALLEROS
REPUBLICA DOMINICANA

2. FORMACIÓN DEL ALUMNO PARA EL FUTURO
En un mundo actualizado se hace imprescindible el buen manejo de los medios tecnológicos para
aplicarlos a la educación, como docente estoy consciente de que no estamos debidamente
preparados para enfrentar los nuevos cambios, por lo que es necesario avanzar en el uso de los
recursos tecnológicos.
La sociedad moderna en la que vivimos se caracteriza por el continuo cambio en todos sus ámbitos
(social, cultural, ideológico y político económico, tecnológico etc.) y precisan de instrumentos
tecnológicos para que la educación esté acorde con los nuevos tiempos, en este contexto el sistema
educativo está llamada a jugar un papel más esencial, como activadora ayudando a los sujetos a
adaptarse a las nuevas exigencias.
Esta revolución ha generado en los organismos competentes en el área, una preocupación en
cómo gestionar la calidad educativa de su sistema educativo, inquietud que surge como producto
de las profundas innovaciones tecnológicas y la sociedad cambiante, que buscan respuestas
innovadoras demandando un nuevo sujeto formado con competencias, puesto que los alumnos son
educados mediante un proceso que no corresponde totalmente con la realidad actual.
Pienso que en un mundo globalizado y conectado, cada vez es más eficiente no solo proporcionar
el conocimiento necesario sino que debemos reestructurar el actual modelo de educación y
entender las competencias y características que deben ser estimuladas y enseñadas para los trabajos
del futuro.
Asumiendo los retos que imponen los nuevos tiempos, la escuela tiene como función primordial
preparar a sus alumnos para el futuro con habilidades y competencias académicas requeridas en la
cultura del conocimiento y para el aprendizaje a lo largo de toda la vida, que el mismo tiempo
pueda enfrentarse y dar respuesta a aquellos problemas con los que se va a encontrar cuando salga
de ella. El educando en la actualidad se ve obligado a adquirir unas competencias personales
sociales, profesionales, académicas y tecnológicas que siendo necesarias siempre, hoy en día se
hacen imprescindibles.

3. En este mismo orden de idea, pienso que los futuros profesionales constituyen uno de los aspectos
más importante y de mayor interés que tiene presente el docente, para así lograr la excelencia
educativa; porque el profesional del mañana no debe ser igual al de hoy, todo este proceso no recae
solamente en la universidad, sino que el docente también tiene responsabilidad como un agente
generador de transformaciones en el desarrollo integral de los profesionales futuros.
Para el logro de estas innovaciones los centros educativos necesitan maestros comprometidos,
capaces de enfrentarse a continuos cambios tanto en el contenido de su enseñanza como en la
forma de enseñar, dispuestos a asumir la diversidad del conocimiento, liderazgo, creatividad e
innovación tecnológica para facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje, que sirva de modelo
para el desarrollo integral de los estudiantes que son el futuro de nuestra sociedad, nuestra nación
y nuestro mundo.
Reflexionando acerca de mi rol como docente y el compromiso que tengo con la sociedad, asumo
este reto de transformación e impulsadora del uso de los recursos tecnológicos en nuestro accionar
educativo, para facilitar el proceso y realizar el trabajo con mayor eficiencia y eficacia, pero sin
restarle importancia a la formación de sujetos en valores, de manera que estos son los principios
morales que determinan las reglas y conductas del ser humano, ya que los acompañan durante toda
la vida.
Este egresado formado también en valores personales puede marcar la diferencia entre un
individuo y otro, convirtiéndolo en un ente exitoso, desarrollándose a plenitud de forma
competentes en cualquier ámbito elegido de manera íntegra y disfrutando del compromiso
asumido, de modo que como docente espero contribuir a la formación de ese egresado esperado
que demandan los nuevos tiempos.
A partir de todo lo que se ha planteado, se hace necesario comenzar a plantear iniciativas en las
que se pueda realizar una reflexión profunda y conscientes acerca de las tecnologías que han
predominado en los salones de aprendizajes, a fin de rectificar las practicas pedagógicas cotidianas
y de evaluar la utilización que se hace de los distintos recursos tecnológicos, el educador ha de
transformarse en diseñador, gestor, animador y asesor de experiencias significativas y este es el
mejor escenario para explotar y extraer los aprendizajes que poseen los alumnos.