El documento contrasta el saber vulgar y científico, señalando que el saber vulgar es superficial, asistemático y acrítico, mientras que el saber científico es profundo, sistemático, crítico y basado en pruebas. También distingue el conocimiento empírico, basado en la experiencia, del conocimiento científico, que explica la realidad a través de la observación empírica y el análisis causal. Finalmente, describe los elementos esenciales de la ciencia como un contenido de conocimientos sobre la realidad observable,