La filosofía de Immanuel Kant se centra en responder tres preguntas fundamentales: ¿qué puedo conocer?, ¿qué debo hacer? y ¿qué me cabe esperar?. Kant desarrolla su teoría del conocimiento, la ética deontológica basada en el imperativo categórico y una concepción del progreso de la humanidad hacia la paz perpetua.