El marketing tradicional basado en las 4P (producto, precio, posicionamiento y promoción) se ha adaptado a las 4C del nuevo marketing (cliente, coste, comodidad y conversación), donde el cliente dicta las normas. Las 4C se enfocan en comprender las necesidades de cada cliente y satisfacerlas de manera rentable y a través de la conversación en lugar de la promoción unilateral.