2. CLASIFICACIÓN TUMORES OMS
• La Organización Mundial de la Salud desarrolló un sistema de clasificación de
los Tumores Primarios del SNC basado en la célula de origen del proceso
tumoral y características morfológicas asociadas al pronóstico.
3. CLASIFICACIÓN TUMORES OMS
OMS Grado I: Tumores circunscritos, de lento crecimiento y bajo potencial
de conversión a un tumor de mayor malignidad.
OMS Grado II: Tumores de borde difuso, lento crecimiento y, algunos,
con tendencia a progresar a tumores de mayor malignidad.
OMS Grado III: Tumores infiltrantes con células atípicas o anaplásicas y
mayor número de mitosis.
OMS Grado IV: Tumores de rápido crecimiento con alta tasa mitótica,
pudiendo presentar vasos de neoformación y áreas de necrosis.
6. ASPECTOS CLÍNICOS
Generalmente cursan con:
Hipertensión endocraneana
compensada (ya que la presión
intracraneana se ha elevado
lentamente).
Déficit neurológico: se presenta
cuando hay compromiso de áreas
elocuentes de la corteza (aquellas
con alguna función cerebral
especifica y cuyo daño implica
alteración evidente de la función
neurológica) los síntomas
dependerán esencialmente de la
localización del tumor (motores,
sensitivos, sensoriales o mixtos).
En casos avanzados puede haber
alteración de conciencia, que
suele ser progresiva. Inicia como
somnolencia o apatía y
lentamente va llevando al
paciente al letargo y ausencia de
respuesta ante estímulos
ambientales.
7. ASPECTOS CLÍNICOS
Síndrome de
hipertensión
endocraneana:
Se puede manifestar por cefalea de intensidad progresiva, de manera que
cuando el paciente consulta refiere que lo despierta por la noche. Se
acompaña de hipersensibilidad en el cuero cabelludo.
Los síntomas visuales que se presentan con la hipertensión endocraneana
son variados: visión borrosa o nublada transitoria, amaurosis o hemianopsia,
diplopía de manera típica por compromiso unilateral del VI par craneal
(síntomas tardíos y sugestivos de severidad).
Papiledema, que no siempre se presenta pero su ausencia no permite
descartar hipertensión intracraneal.
8. ASPECTOS CLÍNICOS
• El vómito suele ser un síntoma muy
tardío, que no se acompaña de
nauseas, por lo que es descrito como
en proyectil y puede ser que el
paciente refiera que vomitar le alivia la
cefalea.
• La hernia cerebral en el caso de los
tumores supratentoriales que más se
presenta es la transtentorial en la que
el uncus del hipocampo se desplaza a
lo largo del borde libre del tentorio
(alteración de la conciencia,
alteraciones pupilares y compromiso
motor progresivos).
9. ASPECTOS CLÍNICOS
Síndrome
convulsivo
Es una de las manifestaciones más frecuentes de los tumores, representa el síntoma inicial en la
mitad de los casos y por eso se considera que todo síndrome convulsivo de aparición tardía debe
hacernos sospechar la presencia de una lesión expansiva en el cerebro.
Es más frecuente en las masas frontales, y se presenta como convulsiones focales que pueden
progresar o no a generalizadas o a perdida de la conciencia. Los tumores parietales pueden generar
convulsiones sensoriales que se manifiestan por episodios de adormecimiento, disestesias o
pérdida de la sensibilidad postural.
Considerar que la mayoría de los pacientes están recibiendo algún medicamento para tratar los
síntomas derivados del tumor (anticonvulsivantes, analgésicos y fármacos de uso psiquiátrico).
El paciente debe seguir recibiendo su medicación hasta el día de la cirugía (ha excepción de los
antidepresivo tricíclicos).
11. MANEJO PERIOPERATORIO
Ayuno similar al necesario para otros procedimientos.
Cuando el paciente no tiene déficit de conciencia es recomendable administras premedicación, esto
permite disminuir la ansiedad con la que se ingresa al quirófano.
Considerar que la mayoría de los pacientes están recibiendo algún medicamento para tratar los
síntomas derivados del tumor (anticonvulsivantes, analgésicos y fármacos de uso psiquiátrico).
El paciente debe seguir recibiendo su medicación hasta el día de la cirugía (ha excepción de los
antidepresivo tricíclicos).
12. MONITOREO NO INVASIVO
Ayuno similar al
necesario para
otros
procedimientos.
Cuando el
paciente no
tiene déficit de
conciencia es
recomendable
administras
premedicación,
esto permite
disminuir la
ansiedad con la
que se ingresa al
quirófano.
Monitoreo no
invasivo
Monitoreo
básico no
distinto del
requerido en
otros casos de
anestesia
general. (ECG,
SpO2, presión
arterial,
temperatura y
CO2 espirado)
La capnografía
reviste especial
importancia en
la cirugía de
cráneo, para
manejar la
ventilación.
La temperatura
es
recomendable
que se tome
central, para que
refleje lo más
fielmente la
temperatura
cerebral.
13. MONITOREO INVASIVO
El paciente para cirugía de resección puede presentar variaciones importantes de la volemia, además que
puede requerir medicamentos hipertónicos durante el procedimiento.
Por lo tanto es recomendable la postura de un catéter venoso central para medición de la presión
venosa central y administración de medicamentos.
Línea arterial.
Sonda vesical, no solo por la duración esperada, si no por la manipulación extensa de los líquidos
corporales y de la diuresis.
-Gases arteriales: Se toman una vez la ventilación mecánica se ha estabilizado al comienzo del
procedimiento, para determinar la diferencia entre CO2 espirado y el nivel de PaCO2, para ajustar la
ventilación.
14. FASES DE LA ANESTESIA
• A considerar en la cirugía de tumores intracraneanos en varias fases:
1. Inducción e intubación: puede inducir cambios hemodinámicos
importantes y cambios en la presión intracraneana con repercusiones
clínicas. Una inducción lenta titulando los medicamentos es la solución.
2. Instalación de monitoreo invasivo.
15. FASES DE LA ANESTESIA
3. Posicionamiento y lavado del área
quirúrgica. Refuerzo en la
relajación y el uso de un bolo
anestésico o analgésico opioide
para disminuir la repercusión
hemodinámica que tiene cuando
fijan el marco de la cabeza.
Asegurarnos que las zonas de
presión queden protegidas, que las
articulaciones queden en posición
confortable y que la postura del
cuello no dificulte la ventilación, el
retorno venoso yugular, ni el
funcionamiento del catéter central.
16. FASES DE LA ANESTESIA
• 4. Incisión y craneotomía: usualmente el cirujano infiltra la piel antes de
incidir, esto es doloroso y debe ser prevenido con un aumento en la profundidad
de la anestesia desde unos minutos antes. Si prevemos el uso de agentes
hipertónicos, se inicia su administración en esta fase, de manera que termine la
infusión antes de la incisión de la duramadre.
17. FASES DE LA ANESTESIA
• 5. Resección del tumor: es la fase más larga, comienza con la
retracción del cerebro, momento en que nos debemos esforzar más en
el manejo del volumen cerebral. El sangrado puede ser importante pero
el dolor no, por lo que podemos trabajar con una profundidad
anestésica menor, con la precaución de asegurar la inmovilidad y la
amnesia del paciente.
• 6. Cierre de craneotomía.
• 7. El despertar cuando la cirugía ha terminado.
18. MANEJO POSTOPERATORIO
Los pacientes deben ir a una Unidad
de Cuidados Intensivos para la
vigilancia estrecha de su estado
hemodinámico, respiratorio y
neurológico.
Postoperatorio inmediato
Los riesgos más importantes son:
depresión respiratoria, sangrado en
área quirúrgica o hidrocefalia aguda
con síndrome de hipertensión
intracraneana. Son comunes las
alteraciones hidroelectrolíticas.
19. BIBLIOGRAFIA
• Sinning, M. (2017, 1 mayo). CLASIFICACIÓN DE LOS TUMORES
CEREBRALES | Revista Médica Clínica Las Condes. ELSEVIER
• Niño, M.C. (2005, enero). Neuroanestesia. Enfoque perioperatorio en el
paciente neurológico. Distribuna