El prolactinoma es un tumor benigno de la glándula pituitaria que produce demasiada prolactina. Los síntomas incluyen alteraciones menstruales, infertilidad e inhibición de la producción de esperma y testosterona. El tratamiento con agonistas dopaminérgicos como la bromocriptina o la cabergolina reducen los niveles de prolactina y mejoran los síntomas. La cirugía solo se recomienda si el tratamiento médico falla o no es deseado.
Las úlceras son heridas crónicas que aparecen en la superficie de la piel, secundario al trastorno de la continuidad de la piel.
Según la etiología de cada tipo de úlcera, aplicaremos unas medidas terapéuticas distintas. Por lo que es esencial determinar ante qué tipo de úlcera nos encontramos para poder actuar en consecuencia. Las causas pueden ser múltiples, pero el 95% tienen una etiología venosa, isquémica o neuropática. El 5% restante está en relación con procesos sistémicos, neoplásicos o debido a causas infecciosas.
En este trabajo nos vamos a centrar en las distintas úlceras que podemos encontrar únicamente en las extremidades inferiores.
Los tumores hipofisiarios constituyen del 10 al 15% de las neoplasias intracraneales
Adenomas pequeños incidentales ocurren en hasta el 27% de las glándulas hipofisis examinadas en autopsia
Hasta un quinto de la población presenta anormalidades hipofisiarias en los estudios de RMN
La necrosis se define como la muerte patológica de un conjunto de células o de cualquier tejido del organismo, debida a un agente nocivo que ha provocado una lesión tan grave que no se puede reparar o curar; por ejemplo, el aporte insuficiente de sangre al tejido o isquemia, o un traumatismo. Una vez que se ha producido y desarrollado la necrosis, es irreversible. Cuando hay áreas extensas de muerte tisular debido a la falta de suministro de sangre y presentan infección bacteriana asociada y descomposición, la condición se denomina gangrena.
Las úlceras son heridas crónicas que aparecen en la superficie de la piel, secundario al trastorno de la continuidad de la piel.
Según la etiología de cada tipo de úlcera, aplicaremos unas medidas terapéuticas distintas. Por lo que es esencial determinar ante qué tipo de úlcera nos encontramos para poder actuar en consecuencia. Las causas pueden ser múltiples, pero el 95% tienen una etiología venosa, isquémica o neuropática. El 5% restante está en relación con procesos sistémicos, neoplásicos o debido a causas infecciosas.
En este trabajo nos vamos a centrar en las distintas úlceras que podemos encontrar únicamente en las extremidades inferiores.
Los tumores hipofisiarios constituyen del 10 al 15% de las neoplasias intracraneales
Adenomas pequeños incidentales ocurren en hasta el 27% de las glándulas hipofisis examinadas en autopsia
Hasta un quinto de la población presenta anormalidades hipofisiarias en los estudios de RMN
La necrosis se define como la muerte patológica de un conjunto de células o de cualquier tejido del organismo, debida a un agente nocivo que ha provocado una lesión tan grave que no se puede reparar o curar; por ejemplo, el aporte insuficiente de sangre al tejido o isquemia, o un traumatismo. Una vez que se ha producido y desarrollado la necrosis, es irreversible. Cuando hay áreas extensas de muerte tisular debido a la falta de suministro de sangre y presentan infección bacteriana asociada y descomposición, la condición se denomina gangrena.
La hiperprolactinemia es un trastorno por el cual la persona tiene un nivel anormalmente alto de la hormona prolactina en la sangre. La principal función de la prolactina es estimular la producción de leche materna tras el parto, por lo que un alto nivel de prolactina es normal durante el embarazo
Módulo III, Tema 9: Parásitos Oportunistas y Parasitosis EmergentesDiana I. Graterol R.
Universidad de Carabobo - Facultad de Ciencias de la Salud sede Carabobo - Bioanálisis. Parasitología. Módulo III, Tema 9: Parásitos Oportunistas y Parasitosis Emergentes.
descripción detallada sobre ureteroscopio la historia mas relevannte , el avance tecnológico , el tipo de técnicas , el manejo , tipo de complicaciones Procedimiento durante el cual se usa un ureteroscopio para observar el interior del uréter (tubo que conecta la vejiga con el riñón) y la pelvis renal (parte del riñón donde se acumula la orina y se dirige hacia el uréter). El ureteroscopio es un instrumento delgado en forma de tubo con una luz y una lente para observar. En ocasiones también tiene una herramienta para extraer tejido que se observa al microscopio para determinar si hay signos de enfermedad. Durante el procedimiento, se hace pasar el ureteroscopio a través de la uretra hacia la vejiga, y luego por el uréter hasta la pelvis renal. La uroteroscopia se usa para encontrar cáncer o bultos anormales en el uréter o la pelvis renal, y para tratar cálculos en los riñones o en el uréter.Una ureteroscopia es un procedimiento en el que se usa un ureteroscopio (instrumento delgado en forma de tubo con una luz y una lente para observar) para ver el interior del uréter y la pelvis renal, y verificar si hay áreas anormales. El ureteroscopio se inserta a través de la uretra hacia la vejiga, el uréter y la pelvis renal.Una vez que esté bajo los efectos de la anestesia, el médico introduce un instrumento similar a un telescopio, llamado ureteroscopio, a través de la abertura de las vías urinarias y hacia la vejiga; esto significa que no se realizan cortes quirúrgicos ni incisiones. El médico usa el endoscopio para analizar las vías urinarias, incluidos los riñones, los uréteres y la vejiga, y luego localiza el cálculo renal y lo rompe usando energía láser o retira el cálculo con un dispositivo similar a una cesta.Náuseas y vómitos ocasionales.
Dolor en los riñones, el abdomen, la espalda y a los lados del cuerpo en las primeras 24 a 48 horas. Pain may increase when you urinate. Tome los medicamentos según lo prescriba el médico.
Sangre en la orina. El color puede variar de rosa claro a rojizo y, a veces incluso puede tener un tono marrón, pero usted debería ser capaz de ver a través de ella
. (Los medicamentos que alivian la sensación de ardor durante la orina a veces pueden hacer que su color cambie a naranja o azul). Si el sangrado aumenta considerablemente, llame a su médico de inmediato o acuda al servicio de urgencias para que lo examinen.
Una sensación de saciedad y una constante necesidad de orinar (tenesmo vesical y polaquiuria).
Una sensación de quemazón al orinar o moverse.
Espasmos musculares en la vejiga.Desde la aplicación del primer cistoscopio
en 1876 por Max Nitze hasta la actualidad, los
avances en la tecnología óptica, las mejoras técnicas
y los nuevos diseños de endoscopios han permitido
la visualización completa del árbol urinario. Aunque
se atribuye a Young en 1912 la primera exploración
endoscópica del uréter (2), esta no fue realizada ru-
tinariamente hasta 1977-79 por Goodman (3) y por
Lyon (4). Las técnicas iniciales de Lyon
Presentació de Álvaro Baena i Cristina Real, infermers d'urgències de Badalona Serveis Assistencials, a la Jornada de celebració del Dia Internacional de les Infermeres, celebrada a Badalona el 14 de maig de 2024.
3. Definición
• Es un tumor hipofisario no canceroso que
produce una hormona llamada prolactina.
Esto ocasiona la presencia de demasiada
prolactina en la sangre.
• Tumor hipofisario
Es un crecimiento anormal en la hipófisis, la
parte del cerebro que regula el equilibrio
hormonal del cuerpo
4. Causas
• La prolactina es una hormona que activa las
mamas para producir leche (lactancia).
• El prolactinoma es el tipo más común de tumor
hipofisario (adenoma), representa por lo menos
el 30% de todos los adenomas de la hipófisis y
ocurren con mayor frecuencia en personas
menores de 40 años. Estos tumores son más o
menos cinco veces más comunes en mujeres
que en hombres., pero son infrecuentes en
los niños.
5. Hiperprolactinemia
• La hiperprolactinemia es la alteración hipotálamo-
hipofisaria más frecuente en endocrinología clínica,
y los prolactinomas son los tumores hipofisarios
más comunes, representando más del 50% del total.
6. • La prolactina es segregada en diversas situaciones
fisiológicas, en especial durante el embarazo y la
lactancia, el sueño, el ejercicio físico y el estrés de
cualquier tipo, incluyendo el inducido clínicamente
por la hipoglucemia insulínica. Al ser la única
hormona hipofisaria sometida a un control negativo
por el hipotálamo, prácticamente cualquier afección
de éste o de los vasos porta hipofisarios puede
manifestarse como hiperprolactinemia.
7. • En general los adenomas hipofisarios suelen estar
formados por un solo tipo celular y producir una sola
hormona, aunque puede haber sus excepciones.
• Los adenomas de la hipófisis representan alrededor del
10% de todas las neoplasias intracraneales y hasta el
25% de ellas suelen ser hallazgos en la autopsia.
8.
9. Síntomas
• La hiperprolactinemia produce, tanto en el varón
como en la mujer, alteraciones en la función gonadal
por una doble acción, en el hipotálamo y en la propia
gónada.
• En el ovario, la hiperprolactinemia induce una
inhibición directa de la síntesis de estradiol y
progesterona y bloquea la maduración del folículo
ovárico.
10. Síntomas
• En la mujer, las manifestaciones clínicas de la
hiperprolactinemia crónica consisten con frecuencia
en anomalías menstruales, como oligomenorrea o
amenorrea secundaria e infertilidad. El 40-80% de las
mujeres presentan galactorrea espontánea o tras
expresión mamaria.
11. Síntomas
• En el varón, los niveles elevados de PRL inhiben la
espermatogénesis y la hiperprolactinemia interfiere
en la conversión periférica de testosterona a
dihidrotestosterona.
12. • En el varón las manifestaciones clínicas son pérdida
de la libido, impotencia, reducción del fluido seminal
e infertilidad. Si el trastorno comienza antes de la
pubertad, se reducen los cambios corporales de
masculinización, pero la galactorrea es excepcional.
14. Tratamiento médico:
• La introducción en los años setenta de la bromocriptina
constituyó un cambio radical en el tratamiento de la
hiperprolactinemia.
• Aunque la mayor experiencia en el tratamiento del
prolactinoma se tiene con bromocriptina, en los últimos
años se han desarrollado nuevos fármacos
dopaminérgicos, como lisurida, tergurida o pergolida, de
mayor eficacia y menores efectos secundarios.
15. Tratamiento médico
• El agonista dopaminérgico cabergolina, esta desprovisto
de efectos secundarios y es más potente que la
bromocriptina, por lo que se ha introducido plenamente
en la práctica clínica.
• Aunque se ha reportado pacientes que experimentan
fuertes cefaleas al iniciar el tratamiento con este
fármaco.
16. Tras comenzar el tratamiento, la evolución habitual
es la siguiente:
a) Reducción de los niveles de PRL
b) Mejoría de la galactorrea (si ésta existe)
c) Mejoría de las manifestaciones visuales alteradas
d) Retorno de la menstruación normal y de la
ovulación.
Evolución
17. • El tratamiento con agonistas dopaminérgicos
produce una mejoría súbita de la fertilidad, por lo
que puede producirse embarazo en los primeros
meses de tratamiento, incluso en ausencia de
menstruación.
18. Tratamiento quirúrgico
• Consiste en la adenomectomía selectiva por vía
transesfenoidal, que se reserva para pacientes con
resistencia al tratamiento farmacológico o que no
desean tomarlo durante toda la vida. La cirugía es eficaz
en los microprolactinomas, mientras que en los
macroprolactinomas son frecuentes las recidivas que
obligan a reinstaurar la terapia farmacológica. Por tanto,
la cirugía en este adenoma se practica cada vez menos.
19. • El tratamiento con radioterapia sigue las normas
generales que se aplican para otros adenomas
hipofisarios. Se reserva para prolactinomas resistentes,
invasivos o con crecimiento rápido. La dosis habitual es
de 40-50 G y deben transcurrir años para que sus
efectos sean evidentes.
20. • Aunque son muy raros, ante un prolactinoma que no
evolucione favorablemente con el tratamiento debe
plantearse la posibilidad de que se trate de un
prolactinoma maligno que con el tiempo origine
metástasis dentro y fuera del SNC. Dado que no existe
tratamiento eficaz alguno cuando el proceso metastásico
se ha producido, se debe prestar una atención muy
estricta a los comportamientos "anormales" de un
prolactinoma, tales como disociación entre tamaño de la
masa y concentraciones de PRL, o falta de respuesta al
tratamiento farmacológico, entre otros. Ante la sospecha
de prolactinoma maligno, el tratamiento debe ser
quirúrgico seguido de radioterapia inmediata.
21. Infografía
• Prolactinoma. National Endocrine and Metabolic Diseases Information
Service, National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney diseases.
• Prolactinoma. Pituitary foundation. www.pituitary.org.uk
• http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/000336.htm