Este documento presenta 15 principios éticos para la evaluación de la personalidad. Algunos principios clave son: 1) tomar el tiempo suficiente para aplicar las pruebas; 2) considerar factores más allá de lo numérico como la observación clínica; 3) estar atento a factores verbales y no verbales durante las pruebas proyectivas. También es importante 4) crear un ambiente cómodo y de confianza para los evaluados y 5) explicar que no hay respuestas correctas o incorrectas.