La Teoría General de Sistemas surgió para evaluar las macroestructuras de un organismo a partir de sus microestructuras y encontrar soluciones a problemas. Un sistema se define como un conjunto de elementos dinámicamente relacionados que forman una actividad para alcanzar un objetivo operando sobre datos e información. Los sistemas pueden ser abiertos, interactuando con el medio, o cerrados, siendo herméticos e internamente regulados.