Las enfermedades inflamatorias intestinales incluyen la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. La colitis ulcerosa implica una inflamación continua y limitada a la mucosa del colon, mientras que la enfermedad de Crohn puede afectar cualquier parte del tracto gastrointestinal y comprometer toda la pared intestinal. Ambas afecciones causan inflamación crónica del intestino debido a una respuesta inmune inadecuada en la mucosa, aunque sus características clínicas y morfológicas difieren en varios aspectos.