Este documento presenta la biografía y obra del diseñador gráfico español Amand Domènech. Domènech nació en Barcelona en 1920 y se formó en artes y oficios. Trabajó diseñando carteles, logotipos, publicidad y embalajes entre 1940-1970. Fue miembro fundador de asociaciones como Agrupación de Grafistas FAD e ICOGRADA. También enseñó diseño en varias escuelas de Barcelona. El documento incluye múltiples ejemplos de su trabajo y una reseña biográ
2. 91
1956. Display (13 x 29 cm)
«...obra que unos años atrás no habría enseñado por pudor,
por no parecer decadente o pasado de moda,
pero que hoy tengo el gozo de ver que todavía aguanta,
que tiene unos valores clásicos»
La biografía más difundida de AMAND
DOMÈNECH le define como “cartelista,
ilustrador y diseñador de todo tipo de
soportes gráficos”. Domènech nació en
Barcelona en 1920 donde, en 1939, inició
su formación en la Escuela Municipal de
Artes y Oficios con el pintor escenógrafo
Domingo Soler Gili. Comenzó su trayectoria
profesional a los veinte años. Atribuía parte
de su formación al periodo que trabajó como
insolador de planchas en los talleres gráficos
Manent. Domènech se estableció por cuenta
propia en 1949.
Al igual que otros compañeros de generación,
como Artigas, Pedragosa y Pla-Narbona,
experimentó su “periodo suizo”, entre 1960
y 1962, cuando es invitado a realizar un
“stage” en el prestigioso estudio Klausfelder
en Vevey.
Miembro fundador de la Agrupación de
Grafistas FAD y de ICOGRADA, de la que fue
vicepresidente en 1985, pertenece al selecto
grupo de diseñadores españoles que realizó
–en 1962– una cubierta para “Graphis”
(no
104), la revista suiza que durante décadas
se convirtió en una publicación de referencia
para toda la profesión y en un medio
insustituible para conocer los trabajos y las
tendencias de lo que realizaban los mejores
profesionales gráficos en todo el mundo.
A partir de 1964 comienza su labor docente
en la Escuela Massana como profesor de
plástica publicitaria para continuarla más
tarde en la Escuela Oficial de Publicidad
(1968) y en la Facultad de Ciencias de la
Información de la Universidad Autónoma
de Barcelona (1987).
3. 92
Pioneros
1943. Folleto de producto (14,5 x 19 cm)
1949. Cartel de ciclismo
1941. Ilustración 1967. Tarjetón (15 x 21 cm)
1943. Folleto de producto (12 x 15,5 cm)
4. 93
Amand Domènech
1957. Tarjetón (11 x 15,5 cm)
c. 60. Publicidad de producto farmacéutico. Folleto díptico (23,5 x 22 cm)
1962. Folleto farmacéutico (15 x21,5 cm) 1962. Folleto farmacéutico (15 x 21,5 cm)
5. 94
Pioneros
Década de los 40. Displays
Década de los 40. Ilustración para embalaje
1960. Desarrollo de envoltorio (27 x 24 cm)
1971. Tarjetón comercial de felicitación (15 x 95 cm)
7. 96
Pioneros
1958.Cartel para la Feria de Muestras de Barcelona.
Primer Premio del concurso (70 x 100 cm)
1958. Cartel para la Oficina Municipal de Turismo
e Información del Ayuntamiento de Barcelona.
Primer Premio en el concurso del cartel turístico
(70 x 100 cm)
1957. Cartel de la Inauguración del Estadio
del Fútbol Club Barcelona, con el que ganó el Primer
Premio del concurso (70 x 100 cm)
1963. Cartel para la primera muestra de carteles
de gran formato en la vía pública (4 x 3 m)
9. 98
Pioneros
1954. Tarjetón para industrias farmacéuticas (11 x 15,5 cm)
1951. Marcas para una empresa dedicada
a la fabricación de vestuario profesional.
Arriba rediseño de 1971
1971. Felicitación navideña personal.
Tarjetón díptico (15 x 22 cm)
1968. Logo para la línea joven de una tienda de ropa
10. 99
Amand Domènech
1963. Original publicitario
1964. Original publicitario 1961. Original publicitario
11. 100
Pioneros
1961. ALESIA. Industria de automoción suiza
1965. Logotipo para industria química
1964. Logo para
Ediciones de Occidente
1966. Cartel (70 x 100 cm)
1963. Logo para Diseñadores Comerciales
13. 102
Pioneros
1970. Signo iconográfico para la industria papelera Sarrió
1967. Valla publicitaria para la muestra de grafistas FAD en las Ramblas de Barcelona. También se imprimiría como cartel en formato 100 x 70 cm
1961. Logo de FAESA. Promotora Inmobiliaria
1971. Logo de industria óptica
14. 103
Amand Domènech
1963. Motivos gráficos navideños
1965. Motivo gráfico navideño personal
1963, 1964 y 1965. Sobres para la exposición de Filatelia y Numismática de Gràcia (16,5 x 10 cm)
15. 104
Pioneros
Años 70. Cubierta para la editorial Argos-Vergara (20 x 28 cm)
Años 70. Cubierta para la editorial Seix Barral
(12,5 x 20,5 cm)
1965. Cubierta para la revista IP (21 x 27 cm)
1972. Logomarca
16. 105
Amand Domènech
1963. Cubiertas para Ediciones de Occidente (17 x 22 cm)
1969. Proyectos de logomarca
para el Banco Popular Español
1963. Imagen de la Feria de Laussane. Suiza. Cartel (100 x 70 cm)
18. 107
“”Mi relación con Amand Domènech viene del año 1946. Entonces él tenía
veintiséis años y yo acababa de cumplir los dieciocho. Era una relación de
vecindario entre mi familia y la suya.
Su madre, la señora Joaquina Casanova, trabajaba de modista
para tirar adelante con la economía familiar, ya que había enviudado
hacía tiempo. Amando, que era como le llamaba su madre, era una
persona de extrema sensibilidad. En aquélla época tocaba el violín.
Además creo que practicaba TAO avant la lettre: los comportamientos
agresivos y violentos no iban con él; aún más, le angustiaban y le ponían
enfermo. Amand representaba la simplicidad original del ser. Cuando
digo esto, me refiero a la base de filosofía mística que había en su
actitud pacífica, observadora, quieta, atenta, reflexiva y analítica que le
conducía a la acción sin lucha. Es más, creo que su matrimonio con María
Nuria Serra le permitió, gracias a el amor, potenciar la práctica de la vía
mística. Esta manera de ser se refleja en su estilo, que siempre buscó el
perfeccionismo, a mi parecer en detrimento de la novedad y de aquello
que hoy en día se denomina creatividad.
Amand y yo solíamos ir a pintar paisajes a la acuarela cuando el
cemento no había invadido todavía las vías públicas. Desde 1947 a 1949,
a causa de la relación de vecindad, trabajé de aprendiz en su estudio de
la Avenida Meridiana de Barcelona. Un período muy corto a consecuencia
del deseo de forjarme un futuro propio en aquella epoca tan triste y gris
de postguerra.
La señora Joaquina Casanova tenía un piso amplio en la Avenida
Meridiana y me alquiló una habitación donde me instalé como dibujante
publicitario, en aquella época la palabra diseño no definía nuestro
trabajo. El inmueble tenía las características de la arquitectura catalana
noucentista. Era un espacio agradable porque tenía una galería a
poniente, donde devoré mis primeras lecturas: La montaña mágica de
Thomas Mann, Stefan Zweig, Sigmund Freud...
Mi biografía personal y la de Amand Domènech fueron muy
ligadas durante esta primera època. Por este motivo, el año 1996
Amand me firmó un libro con la siguiente dedicatoria: “Al Josep de
l’infantesa” (“Al José de la infancia”). Después el camino profesional y
vital fue diferente para cada uno de nosotros, aunque nunca dejamos
de relacionarnos. En 1961 un grupo reducido de dibujantes publicitarios,
ilustradores y pintores, que nos reuníamos en el Café Oro del Rin de la
Gran Vía barcelonesa y, más tarde, en el Café Terminus de la calle Aragó,
comenzamos a pensar en agruparnos como asociación profesional
siguiendo el modelo de las asociaciones europeas. Nos encontramos,
sin embargo, con las leyes franquistas que no permitían este tipo
de reuniones si no tenían el soporte de una institución reconocida
oficialmente. Recurrimos al Fomento de las Artes Decorativas (FAD). He
de dejar constancia de que fuimos favorecidos por la buena acogida
que nos dio la junta del FAD y su presidente de entonces, que era Alfons
Serrahima.
El año 1962 tuve la oportunidad de trabajar en Zurich, durante seis
meses, en la agencia de publicidad Adolf Whirtz. En Suiza las distancias
tienen la dimensión humana suficiente como para permitir visitar con
regularidad a Joan Pedragosa, que trabajaba en el Conseil de Publicité
Ralph M. Chavannes de Lausanne y Amand Domènech, que fue invitado a
colaborar en el estudio Klausfelder S. A., de Vevey.
En 1963 Amand ya había vuelto a Barcelona y entre todos hicimos
nacer a Grafistas Agrupación FAD. El arquitecto Antonio de Moragas i
Gallissà, como nuevo presidente del FAD, dio un impulso más dinámico
a todas las asociaciones de la agrupación, entre ellas el ADI/FAD, con
André Ricard a la cabeza. Amand era, entonces, el secretario de Grafistas
Agrupación FAD y asistió en Londres a la fundación de ICOGRADA.
Lo que querría destacar de Amand Domènech, en este recorrido
sentimental, es que era un hombre tranquilo y sencillo, que tenía una
actitud firme pero pacífica ante los problemas o injusticias cotidianas, que
optó por la vía mística (que le llevó a practicar yoga o tai-txi los últimos
años de su vida) y que era muy perfeccionista en su trabajo.
Josep Pla-Narbona / Diseñador gráfico