2. ¿QUÉ ES EL PARKINSON?
La enfermedad de Parkinson es un
tipo de trastorno del movimiento.
Ocurre cuando las células nerviosas
(neuronas) no producen suficiente
cantidad de una sustancia química
importante en el cerebro conocida
como dopamina. Algunos casos son
genéticos pero la mayoría no parece
darse entre miembros de una misma
familia.
3. CAUSAS DEL PARKINSON
Causas genéticas
En los últimos 10 años, los investigadores han identificado algunos
casos poco frecuentes en los que la enfermedad de Parkinson parece
ser provocada por una única mutación genética. En estos casos, el gen
mutado se transmite de generación en generación, lo que da como
resultado un gran número de casos de la enfermedad en el seno de
una familia ampliada.
Causas ambientales
En el extremo opuesto del espectro, a comienzos de la década de
1980, un grupo de usuarios de heroína en California consumió
fármacos de un lote contaminado con una sustancia denominada
MPTP. Tras ingerir esta sustancia química, los consumidores de drogas
presentaron una forma de la enfermedad de Parkinson cuyo origen fue
principalmente, si no de manera exclusiva, “ambiental”.
4. SÍNTOMAS DEL PARKINSON
Problemas con el equilibrio y la marcha
Músculos rígidos
Achaques y dolores musculares
Presión arterial baja al levantarse
Postura encorvada
Estreñimiento
Sudoración y no ser capaz de controlar la temperatura corporal
Parpadeo lento
Dificultad para deglutir
Babeo
Habla más tranquila y lenta, y voz monótona.
5. TRATAMIENTOS PARA LA ENFERMEDAD
Existen varios métodos para el tratamiento del párkinson
Farmacología
Cirugía
Tratamientos síntomas no motores
Terapias no farmacológicas
Actualmente la enfermedad de Parkinson no tiene cura, pero sí se puede controlar eficazmente. Se conocen muchos aspectos del
proceso neurodegenerativo subyacente a la enfermedad, pero los tratamientos que lo modifican todavía están en fase experimental. Por
lo tanto, el tratamiento de la enfermedad de Parkinson actual se dirige únicamente a mejorar los síntomas derivados de la pérdida y
muerte neuronal. Como consecuencia de esto, los afectados de párkinson deben ingerir estos fármacos anti parkinsonianos de por vida,
según la dosis y combinación de medicamentos que su neurólogo considere más adecuado para su caso en particular.
En la enfermedad de Parkinson el tratamiento va dirigido tanto el control de los síntomas motores como al de los no motores pues a
veces estos últimos son incluso más incapacitantes. Al inicio de la enfermedad, predominan los síntomas motores que responden a
levodopa pero, en el caso de la enfermedad de Parkinson avanzada, los problemas a resolver son los relacionados con los efectos
secundarios a largo plazo de la medicación dopaminérgica así como síntomas motores y no motores que no responden a levodopa.