Revista digital sobre las emociones, su importancia de los procesos fisiológicos como base fundamental para el estudio y la interpretación del comportamiento humano
2. VIBRATESLA REVISTA DIGITAL QUE MUEVE TUS EMOCIONES
La felicidad
EL ULTIMO MOTIVO DEL
SER HUMANO
LA IRA
NO ES LA RESPUESTA
CÓMO PODEMOS MANEJAR
LA ANSIEDAD TOMAR UNA DECISIÓN DIFICIL, ¿GENERA
ANGUSTIA?
¿QUÉ HACER ANTE EL ESTRÉS?
EL DOLOR
Y SU
TRATAMIENTO
EDICIÓN XII
3. La felicidad
EL ULTIMO MOTIVO DEL SER
HUMANO
Hasta Nietzsche se
preguntó cómo
podemos ser felices.
Autor: Patricia Rodríguez
Exp. HPS 173-00320V
La felicidad consiste en el aumento
en la actividad de un centro cerebral que
se encarga de inhibir los sentimientos
negativos y de aquietar los estados que
generan preocupación, al mismo tiempo
que aumenta el caudal de energía
disponible. En este caso no hay un
cambio fisiológico especial salvo, quizás,
una sensación de tranquilidad que hace
que el cuerpo se
recupere más rápidamente de la
excitación biológica provocada por las
emociones perturbadoras. Esta condición
proporciona al cuerpo un reposo, un
entusiasmo y una disponibilidad para
afrontar cualquier tarea que se esté
llevando a cabo y fomentar también, de
este modo, la consecución de una amplia
variedad de objetivos.
La felicidad es un “estado de grata satisfacción espiritual y física”. Esta definición
encajaría bastante con la versión de Platón, ya que para el filósofo griego, alumno de
Sócrates, radica en el crecimiento personal y es fruto de la satisfacción conseguida a
través de pequeños logros.
4. Ser feliz es algo que las personas buscan a lo largo de toda su vida. Mientras que unos piensan que es un estado pasajero,
algunos expertos aseguran que el secreto de la felicidad reside en crearla.
Sea cual sea el caso, existen algunos hechos, probados científicamente, que ponen la felicidad a nuestro alcance. Te
contamos cuáles son y porqué deberías ponerlos en práctica.
1. Sonreír más: Solemos pensar que la sonrisa es una
consecuencia de un sentimiento feliz, pero los expertos han
demostrado que puede también ser la causa. Cuando
sonreímos nuestro cerebro produce endorfinas, una
sustancia que ayuda a mejorar nuestro estado de ánimo.
2. Hacer ejercicio: Acelerar tu ritmo cardíaco y hacer
bombear la sangre por todo tu cuerpo también aumenta la
cantidad de endorfinas, por lo que te hace sentirte mejor.
3. El yoga: Practicar yoga es altamente beneficioso para tu
salud y eso, por descontado, hace que te sientas más feliz.
4. Dormir más y mejor: La falta de sueño está directamente
relacionada con el mal humor, el estrés psicológico y la
depresión, por lo que es muy importante darle importancia
a dormir bien.
5. La luz del sol: La luz del sol aporta vitamina D a tu cuerpo,
una vitamina esencial para aumentar la felicidad.
6. Comer bien: Las comidas copiosas o con alto contenido
en grasas, así como las
Hay pequeñas cosas en la vida que nos hacen sentir mejor, tanto con nosotros mismos como con el resto del mundo.
bebidas con gas y los endulzantes artificiales, hacen que tu cuerpo se
sienta más pesado, adormilado y cansado, e incluso afectan
negativamente en tu vida sexual.
7. Comer chocolate: Aunque sabemos que no hay que abusar de él, el
cacao ayuda a mantener la piel joven y protegida del sol, además
reduce el estrés y refuerza el sistema inmunológico.
8. La música: La ciencia ha demostrado que la música es uno de los
mejores antidepresivos y que ayuda a calmar tu sistema nervioso hasta
en un 65%.
9. Tener una mascota: No en vano se dice que los perros son el mejor
amigo del hombre y es que numerosos estudios avalan que tener una
mascota puede mejorar tu calidad de vida. El cariño que recibes del
animal te hace sentir más alegre y querido.
10. El contacto humano: Desconectar de la tecnología y quedar con
tus amigos o ver a tu familia hace un efecto muy positivo e inmediato
en ti. el contacto humano hace que se multiplique el número de
hormonas como la serotonina, la prolactina y la oxitocina, que son las
que provocan felicidad y placer.
5. Cuando percibimos que somos tratados injustamente,
cuando nos sentimos heridos o cuando vemos dificultada
la consecución de alguna meta importante, sentimos ira.
Sentir esta emoción en estas circunstancias nos
predispone a la acción en un intento de protegernos de
aquello que nos hace daño y que es el origen de esta
emoción.
La ira es una emoción que nos
acompaña a lo largo de nuestra vida.
No en vano, la ira siempre esta
presente en situaciones de conflicto, ya
sean con otros o con nosotros mismos
y puede oscilar desde una leve
irritación hasta el más profundo de los
odios.
COMPRENDIENDO LA IRA
La ira como todas las demás emociones es una reacción compleja en la que se ponen en funcionamiento tres tipos de
respuestas.
La primera es una respuesta corporal, en la que nuestro cuerpo se activa para la defensa o el ataque. Nuestro ritmo
cardiaco aumenta al igual que nuestra respiración se acelera, nuestros músculos se tensan y el flujo sanguíneo se
dispara preparándonos para actuar ante una amenaza percibida.
Cuando este estado de excitación permanece estamos más predispuestos a actuar de forma impulsiva llegando a
emitir conductas agresivas.
La segunda es una respuesta cognitiva, es decir, depende de nuestra manera de interpretar las situaciones. Cuando
estamos inmersos en una situación, esta por si sola no tiene ningún valor emocional, es la valoración personal que
hacemos de ella la que le confiere un significado. De esta manera, las emociones están en función de nuestros
pensamientos, así que cuando interpretamos una situación como un abuso, una injusticia, una falta de respeto o
como un obstáculo para conseguir una meta, sentimos ira.
6. Ahora bien, no debemos confundir la emoción de la ira
con la agresividad, ya que ésta es una de las múltiples
maneras de gestión emocional. Experimentar y
expresar la ira a través de la agresividad depende de
las conductas que hayamos aprendido a lo largo de
nuestra vida.
No obstante hay otras conductas en la gestión de la ira
que no están orientadas a la destrucción del obstáculo
sino a la resolución de problemas.
Pensamientos del tipo "esto es intolerable", "como se
atreven a tratarme así" "pero quien se cree que es", "la
vida se empeña en ponerme trabas" etc, son el
combustible perfecto para incrementar y prolongar los
sentimientos de ira aumentando la posibilidad de ser
agresivos.
La última respuesta de la ira tiene que ver con la gestión
conductual en estas situaciones. La conducta en estas
circunstancias está orientada para defendernos de
aquello que se interpone un nuestro camino y para ello
se genera una energía interna que mueve a la
"destrucción" del obstáculo.
Todos sabemos que la ira puede tener una consecuencias
catastróficas para nosotros y para los demás. La gestión
irracional de esta emoción puede llevarnos a situaciones
lamentables obteniendo el efecto contrario a lo que
buscábamos en un principio.
Algunas de las consecuencias negativas a las que nos puede llevar la ira son las siguientes:
Puede desorganizar nuestra manera de pensar y nuestras acciones.
Cuando estamos bajo la influencia de la ira tendemos a actuar impulsivamente, nos cuesta pensar con
claridad y por tanto no somos capaces de ver la repercusión de nuestro comportamiento.
Supone una defensa cuando no es necesario.
Ceder a la ira puede ser una forma de proteger nuestro orgullo, a veces es más fácil sentir ira que sentirnos
heridos y ser conscientes de nuestra vulnerabilidad. De este modo, la ira dificulta reconocer nuestros propios
sentimientos.
7. Compromete la salud.
La ira cuando es un estado
habitual de la persona puede
favorecer el desarrollo de
enfermedades cardiovasculares.
Trasmite una impresión negativa
a los demás.
Los demás pueden evitarnos,
nuestras relaciones personales se
resienten y por tanto nos
sentimos aislados.
Ceder a la ira puede ser una forma de proteger nuestro
orgullo, a veces es más fácil sentir ira que sentirnos heridos y
ser conscientes de nuestra vulnerabilidad. De este modo, la
ira dificulta reconocer nuestros propios sentimientos.
BENEFICIOS
La ira bien gestionada también
aporta beneficios en nuestra vida.
No hay que olvidar que como
emoción no la podemos dejar de
sentir y por tanto es importante
que juegue a nuestro favor en vez
de a nuestra contra.La ira nos energiza.
Nos provee de fuerza para acometer tareas que nos resultan difíciles. Nos ayuda a
defender nuestros derechos y puntos de vista ante los demás.
Nos ayuda a resolver conflictos.
Expresar la ira de forma adecuada hace que nuestros sentimientos negativos se
desvanezcan.
Nos proporciona información sobre situaciones y personas.
La ira como señal de alarma nos informa de situaciones injustas, amenazantes y
frustrantes, y por tanto nos ayuda a buscar planes alternativos de acción para
gestionar estas situaciones.
8. Buscar la causa de nuestro
enfado y expresarlo de
manera adecuada.
Aprender a identificar que nos
molesta es la primera acción a
tener en cuenta cuando estamos
enfadados. Una vez reconocida la
causa es positivo expresarla de
manera eficaz utilizando
argumentos honestos y sinceros, en
vez de amenazas o insultos.
Practicar el respeto.
Nuestras reacciones de ira
vienen dadas por la percepción
de falta de respeto. Exigir
respeto hacia uno mismo no es
incompatible con respetar a los
demás.
No ceder al resentimiento.
Si tenemos ira sin resolver,
cualquier pequeño inconveniente,
puede hacer que estallemos en
ira. Por lo que es fundamental
resolver problemas del pasado
para que no estén presentes en
nuestro día a día.
Practicar técnicas de
relajación.
Ya sea respiración, meditación,
pasear, pintar, escuchar
música o cualquier actividad,
que nos ayude a desviar
nuestra atención de los
pensamientos que alimentan la
ira.
Poner distancia.
Si notamos que nuestra ira va en
aumento, es positivo poner
distancia con la situación, ya sea
abandonando el lugar donde
estemos o tomarnos un momento
para "contar hasta 10" y
relajarnos. Esto nos ayudará a
calmarnos, a ver las cosas desde
otra perspectiva más realista y por
tanto a buscar soluciones positivas
a la situación.
“La ira es un veneno que
uno toma esperando que
muera el otro”.
William Shakespeare
ESTRATEGIAS PARA REGULAR LA IRA
Trabajar la empatía.
La hostilidad se genera por la
interpretación de las situaciones. Es
necesario ponerse en la piel del otro
para entender la situación de forma
objetiva para poder evaluar la
situación desde otra perspectiva.
9. El dolor es una experiencia sensorial y emocional (subjetiva) desagradable, que pueden
experimentar todos aquellos seres vivos que disponen de un sistema nervioso central. Es una
experiencia asociada a una lesión tisular o expresada como si ésta existiera. Actualmente se
entiende el dolor como el producto de un conjunto de mecanismos neurofisiológicos que
modulan la información del daño físico a diferentes niveles y en diferentes partes.1 La ciencia
que estudia el dolor se llama algología.
EL DOLOR
Y SU
TRATAMIENTO
La función fisiológica del dolor es señalar al
sistema nervioso que una zona del
organismo está expuesta a una situación que
puede provocar una lesión.
Esta señal de alarma desencadena una serie
de mecanismos cuyo objetivo es evitar o
limitar los daños y hacer frente al estrés.
•Detectores de la señal nociva: depende de la
existencia de neuronas especializadas en la
recepción del dolor, denominadas
nociceptores.
•Mecanismos ultrarrápidos de protección
(reflejos): son reacciones rápidas, generadas a
nivel de la médula espinal que pueden tener
como efecto
•una reacción de retirada (por ejemplo,
cuando se retira la mano rápidamente al tocar
una superficie ardiente);
•una contractura de la musculatura que
bloquea la articulación si se
ha producido una lesión articular (es el caso
del lumbago después de la lesión de un disco
intervertebral tras un movimiento en falso).
•Mecanismos de alerta general (estrés), por
activación de los centros de alerta presentes
en el tronco cerebral; ello se traduce en un
aumento de la vigilancia y de las respuestas
cardiovasculares, respiratorias y hormonales
que preparan al organismo a hacer frente a la
amenaza (mediante la huida o la lucha).
10. • Mecanismos de localización consciente e inconsciente de la lesión, a nivel del cerebro; la
localización es precisa si la lesión se produce en la piel y difusa o incluso deslocalizada si la
lesión afecta un tejido profundo o en el caso de un dolor visceral.
• Mecanismos comportamentales para hacer frente a la agresión: debido a la activación de
centros especializados en el cerebro, aumenta la agresividad y pueden producirse
manifestaciones de cólera; estas pulsiones tienen como objetivo movilizar la atención del
sujeto e iniciar los comportamientos de huida o lucha para preservar la integridad corporal.
• Mecanismos de analgesia endógenos: en ciertas circunstancias estos mecanismos permiten
hacer frente a la amenaza a pesar de que se hayan sufrido graves heridas.
• La participación tanto de fenómenos psicológicos (subjetivos) como físicos o biológicos
(objetivos) en el dolor varía según el tipo de dolor y el individuo que lo manifiesta. Existen
muchos estudios que tratan de establecer dicha interrelación y explicar la vivencia dolorosa.
11. La ansiedad es una respuesta de anticipación involuntaria del organismo frente a estímulos que pueden ser externos o
internos, tales como pensamientos, ideas, imágenes, etc., que son percibidos por el individuo como amenazantes y/o
peligrosos, y se acompaña de un sentimiento desagradable o de síntomas somáticos de tensión.
CÓMO PODEMOS
MANEJAR
LA ANSIEDAD
Se trata de una señal de alerta que advierte sobre un peligro
inminente y permite a la persona que adopte las medidas
necesarias para enfrentarse a una amenaza.
La ansiedad normal es adaptativa y permite a la persona responder al estímulo de forma adecuada. Se presenta ante
estímulos reales o potenciales (no imaginarios o inexistentes).
La reacción es proporcional cualitativa y cuantitativamente, en tiempo, duración e intensidad.
DIFERENCIA ENTRE ANSIEDAD NORMAL Y PATOLÓGICA
12. La ansiedad se considera patológica cuando el estímulo supera la capacidad de adaptación de respuesta del
organismo y aparece una respuesta no adaptativa, intensa y desproporcionada, que interfiere con el funcionamiento
cotidiano y disminuye el rendimiento.
Se acompaña de una sensación desagradable
y desmotivadora, síntomas físicos y
psicológicos, y persiste más allá de los
motivos que la han desencadenado.
Los criterios diagnósticos del Manual diagnóstico y
estadístico de los trastornos mentales, ediciones cuarta
y quinta (DSM-IV y DSM-5, respectivamente),
señalan que la ansiedad debe considerarse patológica
cuando "La ansiedad, la preocupación o los síntomas
físicos provocan malestar clínicamente significativo o
deterioro social, laboral o de otras áreas importantes
de la actividad." Es útil distinguir entre la ansiedad
"estado", que es episódica y transitoria, y la ansiedad
"rasgo", que es persistente y puede reflejar una
personalidad "propensa a la ansiedad".
La ansiedad patológica presenta las siguientes
características: se manifiesta intensamente, se prolonga
y mantiene en el tiempo más de lo debido, aparece de
forma espontánea sin un estímulo desencadenante (de
manera endógena), surge ante estímulos que no
debieran generar la respuesta de ansiedad y se presenta
una respuesta inadecuada respecto al estímulo que lo
suscita.
El límite entre la ansiedad normal y la ansiedad
patológica no es fácil de definir y puede variar entre los
individuos en función de los rasgos de personalidad o,
sobre todo, en función de lo que se ha descrito como un
"estilo cognitivo propenso a la ansiedad".
13. ¿QUÉ HACER ANTE EL
ESTRÉS?
El estrés es un sentimiento de
tensión física o emocional. Puede
provenir de cualquier situación o
pensamiento que lo haga sentir a
uno frustrado, furioso o nervioso.
El estrés es la reacción de su cuerpo a un desafío o demanda. En pequeños
episodios el estrés puede ser positivo, como cuando le ayuda a evitar el peligro o
cumplir con una fecha límite. Pero cuando el estrés dura mucho tiempo, puede
dañar su salud.
El estrés es un sentimiento normal. Hay dos tipos principales de estrés:
Estrés agudo.
Este es estrés a corto plazo que desaparece rápidamente. Puede sentirlo cuando
presiona los frenos, pelea con su pareja o esquía en una pendiente. Esto le ayuda a
controlar las situaciones peligrosas. También ocurre cuando hace algo nuevo o
emocionante. Todas las personas sienten estrés agudo en algún momento u otro.
Consideraciones
14. Estrés crónico.
Este es el estrés que dura por un período de tiempo prolongado.
Usted puede tener estrés crónico si tiene problemas de dinero,
un matrimonio infeliz o problemas en el trabajo. Cualquier tipo
de estrés que continúa por semanas o meses es estrés crónico.
Puede acostumbrarse tanto al estrés crónico que no se de
cuenta que es un problema. Si no encuentra maneras de
controlar el estrés, este podría causar problemas de salud.
Su cuerpo reacciona ante el estrés al liberar hormonas. Estas
hormonas hacen que su cerebro esté más alerta, causar que
sus músculos se tensionen y aumentar su pulso. A corto
plazo, estas reacciones son buenas porque pueden ayudarle
a manejar la situación que causa el estrés. Esta es la manera
en que su cuerpo se protege a sí mismo.
EL ESTRÉS Y SU CUERPO
15. El estrés puede causar muchos tipos de síntomas físicos y
emocionales. Algunas veces posiblemente no se dará cuenta de que
estos síntomas son ocasionados por el estrés. Aquí hay algunos signos
de que el estrés le puede estar afectando:
Diarrea o estreñimiento
Mala memoria
Dolores y achaques frecuentes
Dolores de cabeza
Falta de energía o concentración
Problemas sexuales
Cuello o mandíbula rígidos
Cuando tiene estrés crónico, su cuerpo se mantiene
alerta incluso cuando no hay peligro. Con el
tiempo, esto le pone en riesgo de problemas de
salud, incluyendo:
Presión arterial alta
Insuficiencia cardíaca
Diabetes
Obesidad
Depresión o ansiedad
Problemas de la piel, como acné o eczema
Problemas menstruales
Si usted ya tiene una condición de salud, el estrés
crónico puede hacer que sea peor.
SIGNOS DE DEMASIADO ESTRÉS
Cansancio
Problemas para dormir o
dormir demasiado
Malestar de estómago
Uso de alcohol o drogas
para relajarse
Pérdida o aumento de peso
16. Causas
Las causas del estrés son diferentes para cada persona. Usted puede
tener estrés a causa de buenos desafíos y también a causa de los
malos. Algunas fuentes comunes de estrés incluyen:
Las razones por las cuales usted posiblemente necesite buscar más
ayuda son:
Tiene sensaciones de pánico, como vértigo, respiración rápida o
latidos cardíacos acelerados.
Es incapaz de trabajar o desempeñarse en la casa o en su trabajo.
Tiene miedos que no puede controlar.
Está teniendo recuerdos de un evento traumático.
CUANDO CONTACTAR A UN
PROFESIONAL MÉDICO
Casarse o divorciarse
Empezar un nuevo empleo
La muerte de un cónyuge o
un familiar cercano
Despido
Jubilación
Tener un bebé
Problemas de dinero
Mudanza
Tener una enfermedad grave
Problemas en el trabajo
Problemas en casa
En caso de suicidio si usted tiene
intenciones de quitarse la vida.
Si se siente abrumado por el
estrés o si está afectando su salud.
Si observa síntomas nuevos o
inusuales.
17. TOMAR UNA DECISIÓN
DIFICIL,
¿GENERA ANGUSTIA?
La angustia es un estado afectivo que causa malestar, sensación de sofoco, sufrimiento
mental e incluso tristeza. Está relacionada con el temor (miedo irracional), la
desesperación y, en muchos casos, con la incertidumbre. El miedo a la separación, el
acoso en la escuela o en el trabajo o los pensamientos irracionales e intrusivos, entre
otras situaciones, pueden provocar angustia.
Sus causas
Esta situación de angustia no solo aparece de forma aguda como en el caso del
trastorno de pánico, sino que hay otros factores que pueden llevar a sufrirla. Por
ejemplo, cuando no tenemos claro nuestro futuro y entramos en una crisis existencial
que nos deja dormir pensando en cómo solucionaremos el problema. Para que la
angustia ocurra, entran en juego factores biológicos, psicológicos (y existenciales) y
ambientales. Por eso los filósofos, poetas, psicólogos y psiquiatras se han interesado
por este fenómeno a lo largo de la historia.
Generalmente la angustia aparece en situaciones en las que la persona se enfrenta a
situaciones difíciles, donde hay un elemento amenazante (físico o psicológico), pero
también en aquellas situaciones en las que la persona no ve claro el camino a seguir y,
por tanto, vive una situación de incertidumbre.
A nivel biológico, también hay estudios que afirman que la predisposición genética está
presente en esta condición, y que algunos neuroquímicos juegan un papel importante
en la angustia.
18. A nivel biológico, también hay estudios que afirman que la predisposición genética está presente en
esta condición, y que algunos neuroquímicos juegan un papel importante en la angustia.
Por ejemplo, un aumento de adrenalina o una reducción del ácido gamma-aminobutírico (GABA).
Por último, algunas causas ambientales como las dificultades en las relaciones sociales o malos
hábitos cotidianos, entre otras, pueden precipitar la aparición de la angustia.
SÍNTOMAS
La angustia presenta una serie de síntomas característicos. Son los siguientes:
Preocupaciones y temores excesivos.
Imaginación de escenarios catastróficos.
Desesperación.
Falta de aire, mareos, sudoración tensión muscular, sequedad de boca o fatiga.
Opresión en el pecho.
Sofoco.
Evitación de situaciones temidas.
Dificultades para dormir.
19. Sistema cardiovascular:
Se ha demostrado que el stress que
provoca angustia tiende a aumentan la
frecuencia de los latidos cardíacos, el
gasto cardíaco, y la presión sanguínea,
como a provocar cambios en el ritmo y
el electrocardiorama. Estos
funcionales pueden volverse el foco
neurótico, especialmente si el médico
emite algún comentario imprudente
respecto a ellos.
Hipertensión:
La hipertensión vascular no es, desde
luego una enfermedad específica, sino
más bien una reacción sistemática que
puede ser inducida por muchas causas.
casos en los que el psiquiatra se
primariamente son aquellos en los que
factor principal es la tensión
que actúa a través del sistema
TIPOS DE REACCIONES
PSICOFISIOLOGICAS
Según la experiencia clínica, muestra que a veces un individuo puede
tener, en forma sucesiva o simultánea, trastornos que afectan a varios
sistemas orgánicos. Con el objeto de clasificar estas fallas, se
separarán según el sistema en el que aparecen.
20. La personalidad de un paciente hipertenso muestra
serenidad y afabilidad aparente, pero encubre
actitudes conflictivas de predisposición a la
hostilidad agresiva que debe reprimirse a fin de
mantener fuertes ligas de dependencia,
especialmente hacia personas que ocupan puestos
de autoridad.
Migrañas:
Este síndrome consiste en un mal funcionamiento
neurovascular con muchas facetas, con otros
síntomas somáticos que también se acompañan de
alteraciones en el estado de animo, en individuos
con una personalidad perfeccionista y de gran
empuje, del tipo ejecutivo cuyas metas son siempre
ambiciosas.
Aparato gastrointestinal:
Los síntomas de trastornos gastrointestinales son múltiples, ya que se extienden, desde los que se
localizan en la cavidad bucal y que el dentista observa con mayor frecuencia, hasta la gran variedad de
expresiones de mal funcionamiento en el estómago, el intestino delgado y intestino grueso, y en los
principales órganos secretores que se relacionan con la digestión.
Los síntomas más frecuentes son: anorexia, náusea, indigestión nerviosa, incomodidad por gases,
vómito, eructos, dolor epigástrico, diarrea y constipación.
21. Sistema Músculo esquelético
Artritis reumatoide:
La artritis reumatoide proviene de la frecuente observación de
aparición o la exacerbación de la enfermedad se ha
períodos de stress emocional. Este paciente es un individuo
emocionalmente tranquilo, que rara vez expresa abiertamente
sentimientos y que parece tener satisfacciones sirviendo a los
Sistema respiratorio:
La conducta emocional afecta a el sistema respiratorio tanto
expresión como en su acción. El llanto y la risa, los gritos o el
implican cambios en la acción respiratoria; la respiración
opuesto son repuestas típicas durante períodos contrastantes
acción o descanso.
Dentro de estas están el síndrome de hiperventilación, el
La obesidad:
Se ha interpretado en gran parte como un
aumento en el impulso coercitivo que lleva el
individuo a comer. Se ha tratado de elucidar el
origen de tal impulso patológico, tanto por
medio de impulso fisiológicos como por medio
de estudios psicológicos.
El desarrollo de la obesidad suele ocurrir en un
marco familiar en el que los padres compensan
las propias frustraciones y desengaños de su
vida a través de su devoción hacia el niño.
Al pasar el tiempo, la imagen del cuerpo obeso
llega a tener un gran significado emocional para
el paciente, ya que suele representar el deseo
poderoso y en la vida real proporciona
satisfacción.
22. Sistema endocrino:
Dentro de estas se encuentran:
Diabetes mellitus, hipertiroidismo.
Sistema genitaurinario
Impotencia y eyaculación prematura, trastornos
menstruales, reacciones ante el aborto, la
esterilización y la contracepción.
Sistema nervioso
Alteraciones de la imagen del cuerpo,