Lorenzo Milani fue un sacerdote italiano nacido en 1923 que creía firmemente que la educación debería enfocarse en la igualdad de oportunidades y reducir las diferencias entre ricos y pobres. Abogó por una escuela dedicada a los más desfavorecidos donde el progreso de los estudiantes de menos recursos debe ser la prioridad de los maestros. Sus innovadoras escuelas en Barbiana promovieron contenidos cercanos a la realidad de los estudiantes y una enseñanza basada en el amor en lugar de la competitividad