La vida ejecutiva es cada vez más acelerada. Los mejor adaptados sobrevivirán a esta carrera comercial. Necesitamos vender y "vendernos", cada vez en menos tiempo. De otra suerte otros vendrán y ganarán nuestro preciado negocio. Enfoque por tanto su esfuerzo únicamente en aquellos con la autoridad suficiente para comprar su solución, sin correr el peligro que alguien derogue dicha decisión.