Este documento discute los cambios necesarios en la educación para crear una escuela más democrática. Propone que la escuela debería centrarse en el presente de los estudiantes en lugar de solo prepararlos para el futuro. También sugiere que la escuela debería promover la felicidad, autonomía y ciudadanía de los estudiantes a través de una organización social más participativa, contenidos relevantes y el aprendizaje mediante la investigación y resolución de problemas.