Una paciente de 28 años fue diagnosticada con coriocarcinoma después de presentar sangrado vaginal y dolor abdominal durante 2 meses. Exámenes físicos y de laboratorio revelaron un útero agrandado y niveles elevados de HCG. Biopsias de lesiones vaginales confirmaron el diagnóstico de coriocarcinoma. Se sometió a quimioterapia y una histerectomía, pero desarrolló metástasis pulmonares.