La degradación de la hemoglobina ocurre en las células reticuloendoteliales y consiste en: 1) la separación de la globina para degradarla y regresar sus aminoácidos a la reserva metabólica, 2) la producción de biliverdina, hierro y dióxido de carbono al abrirse el anillo de protoporfirina, y 3) el transporte del hierro a la médula ósea y la liberación de la bilirrubina a la sangre junto con la albúmina.