Este documento analiza las relaciones entre Estados Unidos y China en la cumbre de líderes de APEC en Vietnam. Señala que Estados Unidos y China tendrán opiniones a veces similares y otras distantes sobre temas, dependiendo de sus intereses específicos en cada caso. También contrasta las visiones del presidente chino Xi Jinping, promotor del libre comercio, y del presidente estadounidense Donald Trump, cuyas políticas no siempre se basan en principios compartidos. El documento concluye que las relaciones internacionales actuales son más pragm

1. 23OCTUBRE 2017
opinión / ECONOMÍA
Juan Carlos Mandujano
Socio de PwC
Estados unidos y China, un juego de ajedrez
En el futuro –y
comenzando en la
cumbre de líderes APEC–
veremos a estos dos
países tener opiniones
algunas veces similares y
otras distantes, definidas
caso a caso y según sus
intereses.
omo todos los años, los líderes
de las economías miembros de
APEC se reunieron, esta vez en
Vietnam, para discutir acerca
de temas claves para la integración de la
región. Cabe resaltar que esta iniciativa
existe, entre otras cosas, para fomentar
el libre intercambio comercial a través de
la facilitación y promoción del comercio
y las inversiones. Este propósito se pone
a prueba dada la presencia de Donald
Trump en su primera participación como
presidente de Estados Unidos, lo cual es
un hito en el sentido de que es la primera
vez que un líder de una potencia regional
promueve lineamientos políticos ajenos a
la concepción de este importante foro de
cooperación económica.
Lo cierto es que este año la región
enfrenta un balance de poderes distin-
to, con un presidente en China como
Xi Jinping, que llega a Vietnam con el
inmenso apoyo de su partido y con el
poder definido aparentemente por mucho
tiempo más, según los resultados del XIX
Congreso Nacional del Partido Comu-
nista de China. Es conocido que China
tiene como objetivo ser una megapotencia
global y que cuenta con una agenda de
influencia y dominancia en la región muy
agresiva. Esto comenzó a verse cuando se
constituyó el Banco Asiático de Inversión
en Infraestructura (AIIB, por sus siglas en
inglés), un banco de desarrollo multila-
teral focalizado en financiar proyectos de
infraestructura que fue lanzado en enero
de 2016 con un capital de US$ 100.000
millones, y que nace en contrapeso al
Banco Mundial. Luego, con el lanzamien-
to de la Iniciativa de la Nueva Ruta de la
Seda, ya el plan de expansión fue explí-
cito y, hoy por hoy, China ha ampliado
considerablemente su cuota de poder e
influencia, en línea con lo estimado.
Estimo que el discurso del presiden-
te chino en APEC, promotor del libre
comercio, será muy distinto al de Donald
Trump*. Comparar las participaciones de
ambos personajes en cuanto a su visión
del mundo y, sobre todo, respecto a los
fundamentos de los valores que sustentan
sus políticas, será el punto destacable de
la conferencia de líderes. Ya la reciente
reunión bilateral, para algunos analistas
la segunda y última amigable y de buenos
términos, brindó luces de lo transaccional
que podrá llegar a ser el vínculo entre
ambos países y lo fácilmente que puede
cambiar el discurso de Donald Trump
cuando se enfrenta a opciones de nego-
cios: se anunciaron contratos por
US$ 253.000 millones entre empresas
estadounidenses e intereses chinos. En
el futuro –y comenzando en APEC– ve-
remos a estos dos países tener opiniones
algunas veces similares y otras distantes,
definidas caso a caso y según sus intere-
ses. Esto se aleja del liderazgo internacio-
nal del pasado de la hegemonía estadou-
nidense, que solía contar con una visión
de desarrollo sustentada en principios
compartidos entre la potencia y sus socios
estratégicos, un tiempo en el que las
posiciones políticas eran relativamente
predecibles. Tal escenario es muy distinto
al del pragmatismo campante en términos
económicos transaccionales que enfrenta-
mos hoy y que genera una incertidumbre
preocupante.
¿A qué nueva dinámica de relacio-
nes internacionales nos enfrentamos?
Sin duda, a una en la que no podremos
anticipar absolutamente nada. Vivimos
una etapa en la que la disciplina económi-
ca, política, jurídica y diplomática jugará
un rol preponderante en el desarrollo
internacional. Nuestro país no puede estar
alejado de este juego de ajedrez, cuya
partida recién ha iniciado.
* Artículo escrito previo a la Cumbre
de Líderes de APEC.
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